Tener un equipo deportivo en la ciudad estadounidense de Washington implica que, si bien sea la capital del país, no esté exento de problemas. Sobre todo si se trata del nombre del equipo que acompaña al de la ciudad. Los dos principales equipos, tanto el de la NBA como el de la NFL, tuvieron que cambiarlos por razones de fuerza mayor.

En 1963, la franquicia de la NBA ubicada en Chicago se llamaba Zephyrs. Pero tras cambiar de dueño, se trasladó a Baltimore, cerca de Washington, y se rebautizó como Bullets, que en español significa “balas”, en referencia a la velocidad y letalidad de su jugadores a la hora de enfrentar a los rivales.

Finalmente, una década después finalizaron su traslado a Washington y se convirtieron en una de las franquicias más tradicionales de la mejor liga de baloncesto del mundo. Pero no todo sería color de rosas, ya que nuevos cambios tendrían que sufrir.

Ni bien entrada la década del noventa, la ola de violencia que sufría Estados Unidos impulsó campañas anti armas en todo el país. Y la capital, sede del gobierno, no era la excepción. Por lo tanto Abe Pollin, propietario de la franquicia, decidió en 1995 cambiar el nombre del equipo debido a que era uno violento y no quería influir negativamente en la reputación de la ciudad.

Por lo tanto abrió una encuesta en la que se barajaron opciones como Dragons, Sea Dogs, Express, Stallions y Wizards. Finalmente, este último fue el elegido al mismo tiempo que se cambió la tradicional vestimenta rojo, azul y blanca, por una azul, negra y bronce. De todas formas, el nombre tampoco agradó a cierto sector público, ya que “Wizard” es el nombre con el que se conoce al líder de la organización de odio Ku Klux Khan.

Aún así, los Wizards persisten hasta hoy, y retornaron a la vestimenta con los colores de la bandera estadounidense. Pero no son los únicos que han tenido problemas, ya que en la NFL también hubo conflictos con la nomenclatura del equipo de la ciudad.

Los Washington Redskins son uno de los equipos históricos de la liga de fútbol americano. Desde que estaban ubicados en Boston en la década del treinta adoptaron el nombre en honor a la bravura de la tribu aborigen. Y desde su mudanza a Washington en 1937, nombre y ciudad estuvieron fielmente acompañadas. Hasta el año pasado.

En medio de una polémica que involucró al propietario Daniel Snyder acusado de abuso y maltrato hacia los empleados de la franquicia, muchos sectores sociales reavivaron los reclamos hacia el nombre y logo del equipo al que consideraban racista. El término “piel roja” era considerado despectivo hacia la comunidad aborigen y desde hacía años se intentaba quitar.

Finalmente, debido al escándalo de Snyder, el reclamo dio lugar tras la presión de varios patrocinadores que se vieron perjudicados por la reputación de la franquicia y amenazaron con retirar su inversión si el nombre no se cambiaba. Para la temporada 2020, el equipo pasó a llamarse simplemente Washington Football Team, a la espera de un nuevo nombre.

Desde la familia Snyder aún no definieron cuándo será el cambio de apodo del equipo, pero revelaron que hay alrededor de ocho finalistas para ser el nuevo nombre y estos serían: Red Hogs, Defenders, Armada, Presidents, Brigade, Commanders, Red Wolves, y el actual Washington Football Team.

Entre los aficionados parece haber dos grandes favoritos. Red Wolves es uno que gusta mucho y sin dudas tiene un gran atractivo. Y el otro, es el que tienen actualmente. Para muchos, este le daría un toque único a la franquicia, ya que el resto son un poco “básicos” y les permitiría mantener los colores granate y mostaza que actualmente poseen.