Desde 2005 que la MLS dejó el tradicional formato de Este versus Oeste en su Juego de las Estrellas. Aquel año, el mejor once de la liga enfrentó al Fulham inglés en un partido que inició una tradición de medir a los mejores jugadores de la liga estadounidense contra equipos de todo el mundo.
Anoche, en el Allianz Field de Minnesota, los All-Star de la MLS enfrentaron a un combinado de la Liga MX por segundo año consecutivo y volvieron a quedarse con el triunfo como el año pasado (en 2021 empataron 1-1 pero la MLS venció por penales).
Fue 2-1 con tantos del, curiosamente, mexicano Carlos Vela que milita en Los Ángeles FC y del peruano Raúl Ruidíaz que juega para el Seattle Sounders. Descontó en el final del juego para la Liga MX Kevin Álvarez, jugador del Pachuca.
A nivel selección, Estados Unidos está demostrando una clara superioridad sobre sus vecinos del sur, históricamente los dueños de los éxitos de la región. Pero ahora también lo hace a nivel clubes y liga, como pro ejemplo con la consagración de los Sounders en la Concachampions ante Pumas de la UNAM.
Por eso no extrañó que en apenas dos minutos Carlos Vela conectara un centro de cabeza tras una gran jugada colectiva y pusiera la apertura del resultado que marcaría el desarrollo del partido. Si bien el equipo de la MLS manejó las acciones, también tuvo que depender de lo que hiciera su arquero Dayne St. Clair, ingresado para el segundo tiempo y que cuajó una gran actuación.
Justamente en la segunda mitad fue que llegó el aumento para la liga estadounidense a través de Ruidíaz que se hizo cargo de un penal a falta de veinte minutos para el final del encuentro. La historia parecía liquidada, aunque había tiempo para un tanto más, el del honor para la Liga MX a través de Kevin Álvarez, de apenas 19 años y que es una de las grandes promesas del Pachuca y del fútbol mexicano.
Así, la MLS vuelve a vencer a sus más grandes rivales, aquellos cuyos clubes amargaron en varias ocasiones a franquicias estadounidenses en las competiciones internacionales pero que de a poco empiezan a reponerse y a equipararse, ya sea tanto económica como deportivamente