Trinidad y Tobago y México empataron en la primera jornada de la fase de grupos de la Copa Oro 0-0, en el estadio de los Cowboys de Dallas, el AT&T Stadium. La selección tricolor se vio muy impotente tras patear un total de 30 remates, de los cuales 7 fueron dirigidos al arco, pero sin producir ningún gol. Además, el conjunto dominó por completo la posesión del balón, con nada más y nada menos que un 83%.

La defensa de Trinidad y Tobago lució mucho más dominante, ya que México tuvo 15 tiros de esquina, y en cada uno de éstos, buscaban la forma de deshacerse del balón o de quitárselos. También, a pesar de que México tuvo un 90% de precisión en los pases, con 695 en total, éstos no pudieron completar sus jugadas.

Sin embargo, la ofensiva de los trinitarios tampoco estuvo presente, ya que solo tuvieron un total de 4 disparos, de los cuales ninguno fue dirigido al arco. Un total de 151 pases, con una pobre precisión de un 48%, y con un porcentaje de posesión del balón de un 17% fueron los detalles que hicieron que México no tuviera que esforzarse por defender a su rival.

El partido inició mal para el equipo mexicano, ya que en el minuto 10′ el delantero Hirving Lozano fue tumbado al suelo al recibir un golpe en la capeza. En esta jugada, los jugadores mexicanos pedían un penalti, pero el arbitro no les concedió la falta. Sin embargo, Lozano no pudo continuar en el juego, ya que el golpe fue directo al ojo, por lo que tuvieron que llevárselo al hospital, del que salió hoy 11 de julio.

Luego de muchos intentos y una selección que parecía un “león amarrado”, el partido concluyó con el mismo marcador en el que empezó. México disputará su siguiente partido contra Guatemala, este miércoles, y Trinidad y Tobago lo hará contra El Salvador el mismo día.