La FIFA ha cambiado su estrategia en el sector de videojuegos y los ‘eSports’ para aumentar su presencia en más contenidos, y ha afirmado que el futuro del sector debe implicar a más empresas que controlen los derechos del fútbol, además de Electronic Arts (EA), desarrolladora de los videojuegos de la saga oficial de FIFA en la actualidad.

El organismo rector del fútbol mundial ha manifestado su intención de “tomar decisiones que beneficien a todas las partes interesadas en el fútbol” dentro del sector de los ‘eSports’ y los videojuegos, como parte de una nueva posición comercial.

“La FIFA es optimista y está entusiasmada con el futuro de los videojuegos y los deportes electrónicos de fútbol, y está claro que este debe ser un espacio que esté ocupado por más de una parte que controle todos los derechos“, ha informado el organismo en un comunicado.

Con esto, hace referencia especialmente a EA Sports, el estudio de videojuegos que desde 1997 desarrolla los títulos de la serie de simulación de fútbol FIFA, que actualmente posee los derechos en exclusiva, y cuya última entrega, FIFA 22, se lanzó el 1 de octubre.

El organismo rector del fútbol mundial ha manifestado su intención de “tomar decisiones que beneficien a todas las partes interesadas en el fútbol”. Varias compañías tecnológicas y móviles están compitiendo actualmente por hacerse con los derechos de las competiciones de la FIFA, que colabora con distintos actores para elaborar «una visión a largo plazo» para el sector.

Este comunicado se da en el mismo momento en el que se rumorea sobre que el futuro de la saga FIFA de EA Sports está cerca de tener otro nombre, alejado del de la institución, siguiendo los pasos de Konamia, que cambió su franquicia Pro Evolution Soccer (PES) por el de eFootball.

Con esta decisión, la FIFA espera proporcionar “las mejores experiencias y ofertas posibles para fans y consumidores”, y se propone lograr que los deportes electrónicos y las competiciones reales de fútbol estén más alineadas.

“La FIFA está entusiasmada con el uso de la Copa Mundial de la FIFA (con 4.000 millones de espectadores) y la Copa Mundial Femenina de la FIFA (con una audiencia de 1.200 millones) como plataformas para lanzar e integrar nuevos juegos y ofertas de deportes electrónicos emocionantes“, ha concluido la organización.