Los aficionados de los Rangers no creían que algo así fuera a suceder, al menos no hasta este extremo vertiginoso tras 561 millones gastados y un lineup mucho más competitivo. Los Rangers estaban construyendo lo que eventualmente puede ser visto como una de las organizaciones modelo de la Liga Mayor de Béisbol.
Trajeron un nuevo gerente general, Chris Young. Contrataron a analistas que hablaban el nuevo lenguaje de la evaluación de jugadores y la preparación del juego, haciendo hincapié en las matemáticas, las tasas de giro y los ángulos de lanzamiento por encima de los clichés del béisbol de la vieja escuela. Los mejores equipos de la MLB -los Dodgers de Los Ángeles, los Astros de Houston y los Rays de Tampa Bay- lo han hecho durante años.
Esto es una de las fortelezas que dará frutos al equipo al largo plazo, pero en el corto plazo varias de sus adquisiciones le han dado una enorme mejoría en áreas que flaqueban el año pasado. Veamos algunas de las fortalezas del equipo:
Fortalezas
La adquisición de Corey Seager: A lo largo de su carrera, que se remonta a 2015, el OPS de .870 de Seager es el 22º en el béisbol (mínimo de 2.000 apariciones en el plato). Es el único infielder medio en ese nivel. Hay preguntas sobre si permanecerá en el shortstop a lo largo de su contrato de 10 años, pero se trata de 2022, no de 2026. La mayor preocupación: La durabilidad. Ha jugado 636 de los 901 partidos de los Dodgers (70,5%) desde que debutó en la MLB el 3 de septiembre de 2015. Eso equivale a un promedio de unos 114 juegos por temporada de 162 partidos.
El bateo de Adolis García: García se paseó el jueves por dos veces con la cuenta completa. Esto es un acontecimiento importante por dos razones: En primer lugar, García, que a menudo era demasiado agresivo el año pasado, tiene cuatro caminatas en cinco juegos de entrenamiento de primavera este año, un nuevo máximo para él. En segundo lugar, García casi nunca realizó lanzamientos completos el año pasado. Según el sistema StatCast de la MLB, García se enfrentó a 108 lanzamientos de cuenta completa y solo se abstuvo de hacer un swing en 17 ocasiones (una tasa de swing del 84,3%). De los lanzamientos que aceptó, únicamente tres fueron llamados tercer strike.
Debilidades
El pitcheo: Los Rangers invirtieron 56 millones de dólares a lo largo de cuatro temporadas en Jon Gray, que ha sido un lanzador de la media de la liga en las dos últimas temporadas, pero que tiene un ERA de 5,03 para demostrarlo. Parte de eso se debe a que lanzó en Colorado. Si puede dar a los Rangers 150 entradas en el centro de su rotación, será una inversión sólida. Pero por el momento, es tanto el abridor número 1 como el devorador de entradas designado. Es mucho pedir. Con la adición de Pérez, la inversión en la rotación pasa a ser de 60 millones de dólares. Pero en el montículo queda mucho trabajo por hacer. No es un producto acabado. Y la realidad es que probablemente no puedan terminarlo este año. Pero pueden progresar con ayuda procedente de las ligas menores. Si, al final de la temporada, Winn y Alexy se han integrado con éxito en la rotación, será un paso adelante muy significativo.
La inestabilidad en la tercera base: Los Rangers utilizaron seis terceras bases diferentes en 2021; no es irreal pensar que Ibáñez, que fue titular en 10 partidos allí el año pasado, sea el único de los seis en la lista de 2022. Es una posición transitoria. El intercambio de Kiner-Falefa lo dejó claro. Los Rangers están despejando espacio para Jung (se recupera de una cirugía a largo plazo), pero si Andy Ibañez no se acopla bien en 3B las constantes rotaciones podrían dejar la posición debilitada.
La presión de ganar: Después de 561 millones invertidos en un equipo que no estaba acostumbrado a grandes desembolsos, el éxito de esta temporada con tantas adquisiciones podría dejar al equipo tocado mentalmente si encadena durante la temporada resultados adversos.