El primer año de béisbol profesional de Jasson Domínguez culminó con una temporada completa en la Liga Estatal de Florida Low-A con los Tampa Tarpons de Rachel Balkovec; no respondió exactamente a muchas de las expectativas de los fanáticos de los Yankees.

Tampoco dió destellos sobre el adolescente que se suponía que era un híbrido entre Mike Trout y Bo Jackson.

Domínguez tuvo su momento de gloria en el Futures Game de 2021, debido en gran parte a su fama y no a su desempeño en el campo, no logró sobresalir realmente.

Registró en el terreno una línea ofensiva de .252/.353/.379 con cinco jonrones en 56 juegos. Sin un “destello de superestrella” inmediato.

Mucha gente se quedó preguntándose si habíamos sobrevalorado el potencial de Domínguez. Los sabios ya sabían que habíamos hecho eso (¡¿qué es un híbrido entre Mike Trout y Bo Jackson?!), pero aún creemos que hay una superestrella en su piel, y su debut en Estados Unidos no importaría mucho a largo plazo.

Cumpliendo 19 años en unas pocas semanas, Domínguez probablemente jugará una campaña más completa en 2022. Abordando una temporada completa desde el principio y, con suerte, moviéndose hacia el norte, a High-A Hudson Valley, después de un progreso perceptible.

Jasson ha continuado trabajando, y ha adoptado consigo un nuevo swing, que parece estar más afinado para los strikes de ataque y menos propenso a los “dos resultados reales” de “jonrón o ponche”.

Es útil verle trabajar para corregir fallas entre su primer y segundo año, y cualquier ajuste que pueda hacer para mantener su poder mientras minimiza los errores, ésto lo ayudará a convertirse en una amenaza a largo plazo.

No queremos sacrificar el poder por sencillos o demonizar los ponches para neutralizar su enfoque, pero la nueva preparación de Domínguez parece crear lo mejor de ambos mundos.

No esperemos más escritos aduladores de Domínguez que comparen a ‘El Marciano’ con los grandes del juego hasta que lo veamos en el campo anotando los números que se predijeron.

Sin embargo, sinceramente, reducir la velocidad de su swing exagerado parece algo bueno. Domínguez claramente ha estado trabajando para mejorar durante estos meses. Quizás termine demostrando que sí es algo fuera de este planeta y nos haga volver a creer en los extraterrestres.