Andy Pettitte ganó cinco anillos de Serie Mundial, 256 juegos en Grandes Ligas y en 1996 fue segundo en la votación para el premio Cy Young en la Liga Americana y quizás no podría imaginar que veintiséis años después su hijo, Jared, daría sus primeros pasos como profesional haciendo historia.
Sí lectores, como lo leen, el hijo del estelar zurdo de los Yankees, figura legendaria también de aquellos Astros de Houston subcampeones en 2005; el hijo de Andy fue protagonista el pasado sábado de un juego sin hits ni carreras en Ligas Menores; tal como refiere MLB.com.
La acción
Jared junto a otros tres lanzadores se habían combinado para lanzar el no hitter que le garantizó la victoria a los Astros Blue, con pizarra de 4-0, como parte de una aparición de rehabilitación que Pettitte estaba llevando acabo en pos de recuperarse de una lesión en el hombro.
El hijo de la leyenda lanzó sin problemas el cuarto y el quinto capitulo y esta labor le valió para anotarse la victoria, su primera como profesional, desde que firmara en 2021 con los Marlins de Miami.
El contexto
Ya con anterioridad, Jared había estado trabajando con la filia clase A baja, Júpiter, período en el que no pudo hacer gala de su mejor comando, tampoco de su velocidad y esto conllevó a un espantoso promedio de limpias de 18,00.
Luego de su reciente actuación, se espera que en la organización designen lo antes posible a Jared Pettitte a una de las filiales de clase A para continuar con su preparación.
La perspectiva
Si bien Pettitte fungió como abridor en sus años en la Universidad, lanzando cada cinco días, su enfoque en esta oportunidad estaría centrado en ejercer como relevista, lo que le exigiría estar listo para todos los días.
“… Ha sido un buen año, me ha servido para saber que debo hacer para mantener saludable y con una buena rutina, siento que las cosas están comenzando a cambia…”- le comentó Pettitte a MLB.
Todos sabemos que el camino hacia Grandes Ligas no es un paseo por el Edén ni mucho menos y la historia de Jared Pettitte así lo refleja, hay momentos de lazas, de bajas, de grandes caídas y después de levantarse y mirar hacia adelante y esa es la mejor actitud siempre, como ahora.