La novela acerca de la salud de Fernando Tatis Jr. pica y se extiende. Aunque ahora mismo no parece que los Padres de San Diego hayan adolecido demasiado su ausencia, hallándose en el segundo lugar de la División Oeste de la Liga Nacional con récord de 35 victorias y 22 derrotas a solo 2 juegos de diferencia de la punta, ocupada por los Dodgers de Los Ángeles, ya el tiempo estimado para su regreso está a punto de terminar y todavía no hay certezas sobre su vuelta.

A pesar de que el reconocido comunicador Jon Morosi afirmó que los Frailes esperan tenerle activo antes de que finalice el mes en curso, lo cierto es que parece que la recuperación total del Bebo tardará unas cuantas semanas más.

Faltaría mucho todavía

Gracias a Dennis Lin, quien escribe de los Padres de San Diego para el reconocido portal The Athletic, también conocimos la noticia de que el próximo chequeo de la muñeca dañada de Tatis Jr. será esta semana, pero no especificó qué día.

Sin embargo, desde ya comienzan a correr rumores de que para que Fernando vuelva a ser parte de la nómina principal del mánager Bob Melvin tendrá que pasar unas cuantas alcabalas.

En primer lugar, tendrá que probar a hacer swing y que no haya ningún tipo de molestia. Luego tomar prácticas de bateo, después hacer entrenamientos simulados contra lanzadores reales del club y finalmente ir a Triple A para jugar algunos encuentros y recuperar su forma deportiva.

¿Volverá como designado?

Algo que sí dejó muy en claro el cuadro que viste de marrón y amarillo es que los días de El Niño como jardinero han terminado. Por otra parte, se le ha visto entrenando en el campocorto, pero es muy lógico pensar que tampoco será el torpedero regular de buenas a primeras. Sería arriesgar su salud demasiado y pensando en su historial reciente de lesiones, la verdad sea dicha, no parece una buena opción.

Por eso, todos los caminos apuntan a una intervención ocasional o perenne como bateador designado, un rol que podría sacar lo mejor del dorsal 23 de los Padres, tomando en cuenta su increíble habilidad ofensiva. ¿Será esta la nueva faceta del oriundo de San Pedro de Macorís a partir de ahora?