Elvis Andrus estuvo poco tiempo sin trabajo. Ahora llegó a los Medias Blancas de Chicago y esperan activarlo en la serie que los dirgidos por Tony La Russa tendrán contra los Indios de Cleveland. Andrus está en el último año de su contrato. Pero tiene una vesting option, si llega a 550 apariciones al palto el equipo debe renovarle la opción para 2023,  cuando ganará 23 millones de dólares.

El criollo fue adquirido vía waivers por los patiblancos, según informó inicialmente el periodista Jeff Passan de Espn.com. Oakland no lo quiso más en su plantel y decidió dejarlo en libertad. Pero, más allá de los números y demás yerbas, ¿como encaja Andrus dentro de la tropa de Chicago?

Pues, muy bien. Sin Tim Anderson, actualmente en lista de lesionados por 10 días y Lenyn Sosa con un bajo rendimiento ofensivo y sin alguien con experiencia para cubrir las paradas cortas, Andrus es una excelente opción. Y es que el criollo tuvo un “despido indirecto” en Oakland cuando preguntó porqué no recibía el habitual tiempo de juego.

Como la gerencia sabía lo de la opción, pues ni cortos ni perezosos lo enviaron a otro equipo, vía waivers. Andrus tiene promedio de .237/.301/.373 con ocho jonrones y y 30 remolcadas en esta temporada. Nadie duda de su capacidad defensiva y del liderazgo que pueda ejercer en la tropa de La Russa, la cual pelea por un puesto en la postemporada.

Andrus es un pelotero con 14 temporadas de experiencia en las mayores, dos convocatorias al Juego de Estrellas y participación en la postemporada, justo lo que se necesita en estos momentos de mayor tensión, y en una etapa tan complicada como esta de la lucha por el comodín, bajo el nuevo formato de seis clasificados.

Defensivamente hablando,  Andrus está catalogado como uno de los mejores de la posición. No es el mismo de antes, por aquello de la edad, pero  la experiencia y el conocimiento que tiene de la liga lo convierten en un baluarte para la franja ancha del club patiblanco.

Por cierto, los Atléticos todavía deben pagarle a Andrus 2 millones de dolares  que le restan de contrato. Una granga para los Medias Blancas.