La temporada 2021/2022 de la NBA será histórica para República Dominicana. Desde su arranque, los criollos vieron como tres representantes nacionales ocupaban roles importantes en sus equipos. Sobre todo Chris Duarte, novato elegido en primera ronda del Draft por Indiana Pacers que de a poco se fue ganando un lugar clave en la reconstrucción del equipo; y Karl-Anthony Towns, figura indiscutible de los Minnesota Timberwolves.
Y además de ellos estaba Al Horford. El veterano, uno de los mejores jugadores dominicanos de la historia del baloncesto nacional, regresaba a Boston Celtics dos temporadas después de su salida y que lo tuvieron en las sombras. No pudo encajar en la estructura de Philadelphia y, luego, arribó a un Thunder que estaba más preocupado por tankear que por aprovechar la experiencia de Horford.
El retorno de Al al TD Garden fue valorado por los fanáticos y miembros de los Celtics. Aportaba experiencia, guía y liderazgo en un vestuario que creció desde el momento que se fue. Pero la duda estaba acerca de lo que podía hacer el ala-pívot en la duela. Pero Horford no defraudó. Sino, todo lo contrario.
Con el triunfo de Boston en el Juego 7 de la serie ante Miami, Al Horford se convirtió en el primer dominicano en llegar a unas Finales de la NBA. Y lo mejor, es que su aporte fue muy importante en materia defensiva. Pero los números duros también reflejan la gran temporada que tuvo el de Puerto Plata a pesar de sus 35 años.
En la temporada regular, Horford jugó 69 encuentros, todos de titular, la cifra más alta desde la temporada 2017/2018, la segunda de su primer ciclo en los Celtics, en la que estuvo presente en 72 partidos. Lo mismo se ve reflejado en los minutos, en los cuales promedió 29 por juego, casi similar a los 29.1 que promedió aquella temporada.
Promedió 10.2 puntos que, si bien es el más bajo desde su temporada rookie, no es tan importante dado su rol en el sistema de los Celtics, siendo uno de los mejores en materia defensiva. Un ejemplo de eso, es que promedió 7.7 rebotes, su mejor marca desde 2014, cuando era estrella de Atlanta, y 1.3 tapones, también su mejor registro desde su estadía en los Hawks.
Su récord de anotación en la temporada fue de 21 tantos, marca que logró en dos ocasiones, y en cuanto a los rebotes, capturó 15. Lo destacable, es que esas marcas se dieron en el mismo partido. El 3 de marzo, en la victoria ante Memphis por 120-107, Horford, además, colaboró con 5 asistencias y 2 tapas.
De todas formas, para hablar de la temporada del dominicano, hay que decir que lo mejor de él se vio en la postemporada. Sus mejores registro se dieron en los playoffs, lo que demuestra la gran capacidad de Horford para rendir en los momentos más importantes.
En el Juego 4 de la serie ante los Bucks, Horford fue la figura del encuentro anotando 30 puntos, con un 78% de efectividad en tiros, que incluyen un 71% en triples (5 de 7). Además, aportó 8 rebotes y tres asistancias, para un +/- de 20, el más alto del equipo.
Esa serie contra Milwaukee vio lo mejor de Horford en el año, no solo anulando a Giannis en grandes pasajes de la eliminatoria, sino también en números. En el Juego 3 capturó 16 rebotes, su mejor marca en ese apartado en la postemporada. Y en el Juego 7 ante el último campeón, cedió 6 asistencias, también su registro más alto.
Contra Miami no tuvo planillas espectaculares (se destacan los catorce rebotes del juego de anoche, o los 4 bloqueos del Juego 3) pero la incidencia de Horford se vio en la intensidad defensiva y en provocar errores en el rival. Por eso, tras perderse el primer juego de la serie, Horford tuvo un promedio de valoración de 8,5 en toda la serie, clave para los Celtics.
Ahora, desde Puerto Plata llega el primer finalista nacional en unas Finales de la NBA. Sea cual sea el resultado, habrá garantía de que nuestro Horford dejará cada gota de sudor en la pista, como viene haciendo en cada juego de esta increíble temporada.