LeBron James tuvo la oportunidad de darles a Los Angeles Lakers una victoria crucial sobre ante los Houston Rockets en la última posesión en el último cuarto.
En cambio, el hombre que se acercaba al récord de anotaciones de todos los tiempos de la NBA, quizás más conocido por sus pases, le pasó al único otro miembro activo de su clase de draft un tiro que habría estado más de moda en 2003. Carmelo Anthony falló.
LeBron parecía tener una bandeja abierta pero factible debajo del aro. Melo quien estaba en el perímetro hizo una finta y luego falló el tiro que lo habria dado la victoria a los Lakers. Su tiro fallado llevó a la octava prórroga que los Lakers en 2021-22. Habían ganado seis de siete.
Los Rockets comenzaron tiempo extra con un run de 13-0, encendido por siete puntos consecutivos del Jalen Green. Al final, Los Ángeles cayó 139-130, su cuarta derrota en cinco juegos, para caer a 28-37. Los Lakers han perdido nueve juegos consecutivos en la ruta, cinco de las cuales se han decidido en un momento crítico.
“Tenemos que descubrir cómo ganar en la recta final, cómo ganar estos juegos cerrados”, dijo Carmelo. “No preocuparse por cómo no vamos a perder”.
LeBron, que se perdió la derrota del lunes por un brote en la rodilla lesionada, terminó con 32 puntos, 14 rebotes, 12 asistencias (el máximo de la temporada) y 4 tapones en 45 (!) minutos, a pesar de un inusual 9 de 26. Dio prioridad a la distribución durante gran parte de la noche.
Estas fueron las plabras del Rey:
“Terminé detrás del tablero”, dijo LeBron. “Estaba un poco desequilibrado y podría haber forzado una bandeja inversa, pero no estaba en posición de sentir que podría haber tenido un mejor tiro. Podría haber tenido un gran tiro decente y siento que el tiro de Melo fue mucho mejor que el mio”.
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