Fue un año de idas y vueltas para Novak Djokovic. El serbio tuvo un primer semestre alucinante con tres títulos de torneos de Grand Slam que lo dejaban a las puertas de hacer historia pura. Pero su fracaso en los Juegos Olímpicos y la derrota en la final del US Open ante Medvedev lo hicieron replantearse su futuro. Pero resurgió

El número uno del mundo ganó su sexto título en el Masters 1000 de París y un récord de 37 coronas en dicha categoría de torneos, al vencer al campeón de la edición pasada, Daniil Medvedev, por 4-6, 6-3, 6-3. El serbio se vengó en cierta medida de su oponente, que hizo añicos sus sueños de una barrida de Grand Slam cuando le ganó en septiembre en el cemento estadounidense.

El título le aseguró el segundo récord en dos días después de que fuera confirmado como el número uno del mundo al final de la temporada por séptima vez. Es que ahora, el tenista de 34 años posee un trofeo más de un torneo Masters que Rafael Nadal, que quedó con 36.

En un duelo entretenido, digno de un partido entre los dos primeros del mundo, Djokovic volvió a tener que remontar un set en desventaja después de necesitar tres para vencer a Hubert Hurkacz en las semifinales.

Ahora, al serbio le quedan dos citas en 2021 para terminar el año a lo grande. El ATP Finals de fin de temporada dentro de una semana, organizado por primer vez en Turín tras doce ediciones en Londres, y la Copa Davis con Serbia, a partir de la semana siguiente en la que buscará se segundo título en la competición.