La tenista china Shuai Peng, que fue número uno en el ránking mundial de dobles en 2014 y que en la actualidad es la 191 del ranking individual, se encuentra desaparecida, según el periódico Le Monde, desde que acusó al exvicepresidente de su país Zhang Gaoli de abusos sexuales.
Peng, de 35 años y que jugó su último torneo en febrero de 2020 en Doha, antes del inicio de la pandemia, denunció abiertamente al dirigente chino en la red social Weibo, aunque el mensaje desapareció 20 minutos después.
Según una captura de pantalla de su cuenta verificada en Weibo, Peng declaró que Zhang Gaoli, quien se convirtió en miembro del Comité Permanente del Politburó, la forzó a tener relaciones sexuales y luego tuvieron una relación consensuada intermitente.
La publicación se eliminó una media hora después, aunque las búsquedas del nombre de Peng en el controlado Internet de China aumentaron y las capturas de pantalla se compartieron entre grupos privados de WeChat y a través de iMessage.
En China, el Internet está fuertemente censurado y la vida privada de los principales líderes es un tema especialmente delicado.
Malos presagios
“Tales acusaciones de violación afectan por primera vez a un líder de tan alto rango dentro del Gobierno chino. Pero el silencio de la joven desde que se hizo público el caso suscita temores de lo que le haya podido pasar”, escribe Simon Leplâtre, corresponsal de Le Monde en Shangái. Una de las versiones que corre es que la jugadora había huido a Estados Unidos.