A pesar de las complicaciones por las restricciones por la pandemia, la temporada tenística de este año ha dado mucho de que hablar y, sin duda, será una de las más emocionantes que se recuerden. Sobre todo para Novak Djokovic, que estuvo a un partido de hacer historia.

El serbio perdió la final del US Open a manos de Daniil Medvedev que lo venció categóricamente en tres sets, lo que significó para el número uno del mundo no poder lograr el tan ansiado Grand Slam, ganar los cuatro grandes en el mismo año, ya que ya había logrado este 2021 el Abierto de Australia, Roland Garros y Wimbledon.

Desde ese día no se lo volvió a ver en acción y muchos auguraban que sería el fin de la temporada para el serbio, pero la idea del tenista es terminar el año como número uno del mundo por séptima vez en su carrera y, de esa forma, desempatar el récord que comparte con Pete Sampras.

Por eso, a pesar de no haber jugado desde el major estadounidense, Djokovic seguramente festejó la derrota de Medvedev ante Dimitrov en octavos de Indian Wells, ya le valió una pérdida importante de puntos en el ranking. El ruso es el principal competidor por llegar a la cima de la tabla y las ausencias de Djokovic ponían en peligro su lugar que ocupa desde febrero del año pasado.

Para poder desbancar a Nole, Medvedev ahora necesita prácticamente ganar todo lo que venga, ya que defiende los títulos del Masters de París y del ATP Finals, los torneos que quedan en el calendario que más puntos otorgan. Djokovic, por el momento está confirmado para disputar ambos.