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Aunque han pasado ya varios años desde aquellas memorables carreras en las que Usain Bolt maravillaba al mundo con su poderosa zancada y sus tiempos asombrosos, todavía al Rayo se le recuerda con cariño. La era del jamaiquino ha sido probablemente una de las más ricas a nivel de los deportes olímpicos, con él y otro grande como Michael Phelps ocupando las tapas de los periódicos con múltiples medallas doradas colgadas del cuello.

Su velocidad y su personalidad jovial y llamativa sobre las pistas le permitió al espigado atleta no solo hacerse con el título del hombre más veloz de todos en las pruebas de los 100 y 200 metros planos, sino también de un patrimonio bastante envidiable luego de firmar contratos multimillonarias con varias marcas deportivas y realizar comerciales que marcaron la historia.

No obstante, lo que hoy tenemos para contar es triste y tiene que ver justamente con la situación económica del carismático corredor. A mediados de mes se corrió el rumor de que Bolt perdió una suma de dinero importante luego de ser víctima de un fraude bancario perpetrado en las entrañas de la empresa Stocks and Securities Limited, una organización de su país en la que Usain resguardó parte de su patrimonio, el cual destinaría para la más que digna manutención de sus familiares más cercanos, es decir, de sus padres y sus 3 hijos.

Más tarde, la tragedia financiera se confirmó y se supo gracias al representante del deportista, Nugent Walker, que fueron más de 12 millones de dólares los que le estafaron a su cliente. Las investigaciones han seguido su curso y apuntan como principal sospechoso a un ex empleado de la ya mencionada institución, pero hasta ahora no se sabe en qué parará el asunto.

A su vez, muchos lamentaron el incidente y hasta se preguntaron cómo afectaría esto la vida de alguien que ya no compite y está lejos de su época de gloria. La cruda realidad es que ha sido un golpe duro para el velocista y su entorno, mas no constituye esto una debacle del bolsillo del oriundo de Sherwood Content. El hombre de 36 años afirmó que no está en bancarrota, aunque eso sí, lamenta profundamente lo ocurrido:

“Siempre va a ser triste porque he perdido aquello por lo que he trabajado duro. No importa lo que esté pasando en este momento. Siempre amaré a mi país y haré todo lo que esté a mi alcance para levantar a este país sin importar lo que esté pasando”. Fueron las sentidas palabras de un cabizbajo Usain Bolt. Con todo y eso, el dinero aún no está del todo perdido.