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Michael Schumacher es uno de los mejores pilotos de la historia de la Fórmula 1. Ganador de siete títulos mundiales (solo igualado por Lewis Hamilton), marcó un antes y un después en la categoría reina del automovilismo. Sobre todo, por su paso por Ferrari, donde ganó cinco campeonatos de forma consecutiva entre 2000 y 2004. Por lo tanto, todo lo referente a ese ciclo dominador, es muy codiciado por coleccionistas.
Y Ferrari lo sabe, por lo que decidió subastar un chasis utilizado en la temporada 2000, la que rompió la racha de varios años sin títulos para la Scuderia. Este auto es el chasis 198 con el que el piloto alemán corrió tres Grandes Premios: el GP de Brasil, el GP de Mónaco y el GP de Austria. Si bien no se trata de una de las piezas clave en el título del Kaiser, es parte importante del monoplaza.
En el GP de Brasil, Schumacher logró la pole position. En el GP de Mónaco, volvió a conseguir la pole, pero tuvo que retirarse durante la carrera del domingo por una falla en el motor. Y en el GP de Austria, obtuvo el tercer puesto en la clasificación, pero no pudo terminar la carrera por un accidente con Ricardo Zonta.
Luego del choque en Austria, la escudería italiana reparó el monoplaza (no tenía grandes averías) y lo llevó a todas las carreras que quedaban de la temporada como repuesto por si el nuevo chasis fallaba. Sin embargo, nunca volvió a ser utilizado en la pista y quedó como pieza de colección luego de que en 2001 se renovara el diseño del carro.
Ferrari la expuso en el Salón de Ginebra 2001 y más tarde se la vendió a un coleccionista privado de Texas (Estados Unidos), que consiguió un certificado Ferrari Chassiche en 2005 y la preparó para usarla en eventos F1 Clienti. El propietario actual lo compró en 2016 para llevarlo a las pruebas de Ferrari Corse Cliente, incluyendo eventos realizados en las pistas de Monza y Austin.
A través de la firma británica RM Sotheby´s, ahora sale a subasta por un valor inicial que no fue informado, aunque seguramente contará con varios ceros, ya que se trata de una pieza muy codiciada por los coleccionistas. Además, debido al estado del piloto tras su accidente de esquí en 2013, todo lo referente a Schumacher toma un valor adicional.