El Reino Unido celebró el pasado fin de semana una de sus grandes noches del motor con su gala anual en la que se reparten los premios Autosport, los mismos en los que Zak O’Sullivan ganó su test con Aston Martin en F1 al ser considerado el mejor piloto joven de 2021.

De entre las muchas funciones que tiene una gala a la que acuden múltiples personalidades del mundo de la Fórmula 1 también se encuentra la de recaudar dinero para diferentes organizaciones. En esta ocasión se formó una subasta benéfica cuyos fondos serían donados a Grand Prix Trust, organización dedicada a prestar asesoramiento y ayuda médica a los empleados del mundo Fórmula 1 cuando su situación queda desamparada por otros organismos.

Entre los servicios por los que se podía pujar, se encontraba tour guiado por la fábrica de Mercedes que acabó ganando un misterioso ‘Chrisrian Horner’, un pseudónimo tras el que se escondía el director de Red Bull Racing, que con una puja de 3.000 libras esterlinas, superó a sus rivales.

Ahora, el director de Red Bull ha ganado la posibilidad de visitar las instalaciones donde se desarrolla el nuevo monoplaza de Mercedes, lo cual ha hecho, al menos, estallar de risa a los fanáticos por la curiosidad del asunto. Seguramente, la escudería alemana deberá tener cuidado en que le muestra a uno de sus máximos rivales.

Lo curioso del tema es que no es la primera vez que Christian Horner hace algo del estilo, pues ya ha pujado por visitas guiadas similares, como la que hizo a McLaren junto a Adrian Newey, ex empleado de Woking que ya sabía moverse por la fábrica rival como pez en el agua.

Lamentablemente, no hubo ningún “Tito Wolff” pujando por una visita a las instalaciones del equipo austríaco, lo que hubiera sido un gran cierre de la gala que, de una forma u otra, hubiera alivianado las asperezas entre los equipos que quedaron luego de la polémica definición de la temporada pasada.