Si bien apenas se corrió una carrera de las 23 que conforman el calendario más extenso de la historia de la Fórmula 1, el nuevo reglamento que abre una nueva era en la máxima categoría del automovilismo tuvo su incidencia en el Gran Premio de Bahréin y expuso las nuevas tendencias que se podrán ver durante la temporada.

Si bien el resultado lógico es dejar a Ferrari como el claro ganador tras el 1-2 logrado por Charles LeClerc y Carlos Sainz Jr., hay muchas conclusiones que se pueden sacar tras lo ocurrido en el Circuito de Sakhir, ya que nada tiene que ver con lo que se vio en la temporada pasada.

Ferrari

Claramente, un notición que la Scudería vuelva a los primeros planos. Desde los test de pretemporada se veía que el rendimiento de los monoplazas rojos podía sorprender en este 2022, y no defraudaron. A una potencia notable del motor, se le sumó una fiabilidad muy alta que mantuvo a raya a los Red Bull, logrando no solo la pole, sino ganar la carrera de punta a punta. Un comienzo de ensueño para los tifosi.

Red Bull

Hasta el domingo, todo era color de rosas para la escudería del vigente campeón de pilotos. El equipo austríaco había dominado en los test de pretemporada y en las prácticas libres en Bahréin. Si bien la pole position se le escapó a Max Verstappen por milésimas, las sensaciones eran buenas en la lucha con Ferrari. Pero los problemas de fiabilidad llegaron de forma sorpresiva. En las últimas tres vueltas, ambos monoplazas sufrieron el mismo problema (el motor no recibía suficiente combustible) y debieron abandonar cuando Verstappen estaba segundo y Checo Pérez tercero. Muchos deberes de cara a la próxima carrera.

Mercedes

Mal, pero no tan mal. Lewis Hamilton había anunciado que el equipo estaba lejos respecto a Ferrari y Red Bull y, si bien nadie le creyó, ya que esas declaraciones subestimándose eran habituales y luego el monoplaza volaba derrotando a todos con facilidad, esta vez dijo la verdad. Mercedes tuvo un fin de semana complicado desde las prácticas libres con problemas de rebote en el carro que costaron solucionar. Finalmente, los abandonos de los Red Bull ubicaron a Hamilton en un sorpresivo podio con George Russell llegando en cuarto lugar. Seguramente, el equipo alemán trabaje para mejorar con la confianza de haber logrado un resultado mejor de lo esperado minimizando los daños.

McLaren

Decepción total. Quizás, el mayor afectado por el cambio de reglamento, sumado al bajo rendimiento de los motores Mercedes. La escudería inglesa volvió a su peor versión luego de unos años de crecimiento en los que llegaron a ganar carreras y sumar podios. El monoplaza simplemente no funcionó y ni Daniel Ricciardo ni Lando Norris pudieron llegar a Q3. Es más, el australiano estuvo último en gran parte de la carrera y el inglés sufrió problemas en una de las paradas en boxes que lo dejaron atrás de su compañero. El décimo tercer y décimo cuarto lugar logrado pareció, incluso, un premio mejor de lo esperado.

Alpine

“El Plan”, hasta ahora, no funcionó. Las mejoras que se habían insinuado en el receso todavía no vieron la luz. Es cierto que la escudería francesa tuvo muchos cambios en toda su organización, desde directores, ingenieros y hasta de patrocinadores, pero aún así decepcionó el fin de semana. De todas formas, fueron uno más de los que se benefició del desastre de Red Bull y ambos pilotos sumaron más de lo esperado (Esteban Ocon terminó séptimo, y Fernando Alonso noveno), logrando una buena base para encarar las siguientes carreras.

Alpha Tauri

La filial de Red Bull tuvo altibajos en Bahréin y terminó sufriendo la fiabilidad del motor Honda que también complicó a los austríacos. Pierre Gasly fue el primero en abandonar al incendiarse su unidad de potencia y el equipo tuvo que conformarse con el octavo puesto de Yuki Tsunoda que, hasta el abandono de los Red Bull, apenas había podido entrar en los puntos.

Aston Martin

Muy por debajo de lo esperado. La escudería verde había anunciado mejoras en su diseño y se esperaba que pudiera elevar el nivel respecto a la temporada pasada. Pero, entre la baja de Sebastian Vettel por contagio de coronavirus (lo reemplazó Nico Hulkenberg) y el bajo rendimiento de los monoplazas, el fin de semana dejó mucho que desear. Ninguno de los pilotos pudo pasar de la Q1 y el consuelo fue la remontada de Lance Stroll que subió del 19no al 12do puesto en carrera.

Alfa Romeo

Una de las sorpresas. No se esperaba mucho de la escudería sucesora de Sauber, pero Bahréin los dejó muy bien parados de cara al futuro. Valtteri Bottas tuvo una clasificación sorprendente y, si bien la carrera la largó pésimo perdiendo muchas posiciones, se pudo recuperar y terminó en el sexto lugar inicial. Además, el debutante chino Guanyu Zhou también se metió en los puntos dejando un saldo más que satisfactorio en el primer Gran Premio del año

Williams

Una continuación de la temporada anterior, a pesar de tener la oportunidad de pegar el salto. Alex Albon pudo meterse en la Q2 el día sábado pero el rendimiento del Williams no distó mucho de lo hecho en 2021. Y así pasó la carrera donde en ningún momento ni Albon ni Nicholas Latifi pudieron estar siquiera en el pelotón del medio. Además, fue otro de los que sufrió el bajo rendimiento de los motores brindados por Mercedes.

Haas

La sorpresa absoluta. La escudería más querida de todas, en gran parte por lo mostrado en la serie Drive To Survive y por su carismático director Gunther Steiner, fue la revelación del primer fin de semana de la temporada. Luego de sus problemas con los patrocinadores rusos (rescindió contrato con su principal sponsor Uralkali, que derivó en el despido de su piloto Nikita Mazepin), Haas parecía al borde de la desaparición. Pero contrataron a un viejo conocido como Kevin Magnussen, que sorprendió desde el inicio logrando el mejor tiempo en los test de pretemporada en Sakhir, luego clasificando séptimo y, finalmente, quedando quinto en la carrera gracias a la salida de los Red Bull. A su vez, Mick Schumacher también rindió bien y finalizó en el puesto doce, su mejor resultado hasta ahora.