Sergio Pérez llegó a Red Bull con una misión que sus antecesores no habían podido cumplir: ser consistente y ayudar a Max Verstappen a luchar por el título. El problema es que ser segundo piloto en la escudería austríaca no es nada fácil.
Desde la salida de Daniel Ricciardo en 2019, que significó el “ascenso” del neerlandés como principal conductor, han pasado por el equipo Pierre Gasly (que duró apenas unas carreras y fue devuelto a Toro Rosso, la escudería filial) y Alexander Albon (que estuvo en el equipo una temporada y media y no rindió lo esperado). La presión por los resultados y la inexperiencia por tratarse de pilotos jóvenes en un equipo implacable, fueron los motivos.
Por eso Cristian Horner no dudó y cambió el enfoque. Fichó a Checo que venía de ser despedido de Racing Point y era uno de los mejores valores del mercado. Y el mexicano no defraudó, sobre todo por lo hecho en Yas Marina donde defendió feroz, pero limpiamente, a Lewis Hamilton y permitió a Verstappen acercarse de ocho a un segundo, lo que terminó siendo clave para el desenlace final.
De todas formas, el mexicano pidió “perdón” por sus maniobras con las que no dejó dudas de que buscaba beneficiar a su compañero: “Estoy muy contento por Max, la verdad es que se lo merece. Se lo merece todo el equipo. Al final, me encontré en una situación como deportista, como persona, como piloto, en la que no te quieres encontrar. Perjudicar a alguien en un Mundial es algo que no lo quieres hacer, pero, al final del día, lo he hecho por mi equipo”.
Checo se ganó el aplauso tanto de Verstappen como del resto de los miembros de Red Bull, pero finalmente siguió sintiendo “culpa” por Lewis, a quien reemplazó en McLaren en 2013, tras la partida del británico a Mercedes.
“Estoy seguro de que el mismo Hamilton lo entenderá muy bien. He hecho todo más que por Max, por mi equipo. Son circunstancias en las que la vida te pone ahí y lo tienes que hacer por ellos. Al final, pude ayudarlo y eso es importante. Creo que esos 10 segundos o así que perdió Hamilton fueron los que hicieron la carrera porque son las ventanas. Si no hubiera ayudado en todas las ventanas podía haber hecho que en el ‘safety car’ hiciera una parada y la carrera hubiera sido relativamente fácil para Lewis”