Si había un partido atractivo para mirar este fin de semana en la Major League Soccer, ese era el del Portland Timbers contra el Austin FC. Era el duelo de uno de los equipos más regulares y laureados de los últimos tiempos contra la gran revelación de esta temporada 2022.
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Ayer, saltaron al engramado del estadio Providence Park ambos conjuntos a dirimir sus diferencias, y aunque el vencedor del cotejo fue el Timbers por marcador de 1×0, los chicos de Texas pueden decir con orgullo que no fueron arrollados ni mucho menos. Salieron con la frente en alto.
De hecho, si nos centramos en las cifras del compromiso, puede que encontremos razones suficientes para creer que el ATX seguirá siendo la sensación del campeonato y no un simple fogonazo.
Los números no engañan
Aunque el marcador muestre un resultado final favorable a los leñadores, hubo importantes departamentos estadísticos donde el dominio del Austin es innegable. Por ejemplo, en posesión de balón el cuadro que fue fundado en el 2018 mandó con 62% sobre 38%. En pases realizados y porcentaje de los mismos completados también apabulló. Fueron 564 sobre 365, y un 84% de efectividad de los mismos por encima del 76% de los locales.
Pero no solo eso, en tiros de esquina El Verde igualmente fue superior con 9, 7 más que Portland, y en quites lideró 8-7. En remates al arco estuvieron parejos, 13 contra 14, pero de nuevo la ventaja fue para los visitantes.
Esto demuestra que el Austin FC mandó en el juego, o que por lo menos, peleó de tú a tú con uno de los más poderosos de todo el circuito.
El gol que definió el partido
En el minuto 40′ del primer tiempo, el central neozelandés Bill Tuiloma envió al palo derecho del arco del Austin FC un remate con la cabeza. Era un aviso de cómo iba a terminar todo.
Corría el 62′ cuando la misma acción se repitió, pero no con la misma fortuna para los dirigidos por Josh Wolff. Centro de Yimmi Chará desde una falta escorada y gol de cabeza de Tuiloma; los 3 puntos see quedaron en casa.
Los últimos momentos fueron de nerviosismo puro con un Austin que arrinconó a su adversario, no pudo conseguir el empate y perdió el invicto. Aunque eso sí, se ganó el respeto de miles de fanáticos de la MLS con esta gran demostración de pundonor y gallardía.