Miguel Ángel Ramírez es el nombre del director técnico del Charlotte FC, pero no solo eso representa este hombre para la escuadra número 28 de la Major League Soccer. Él es más aún, es el gestor de un proyecto sin precedentes en el fútbol de los Estados Unidos y también una persona para la cual este reto significa más que un simple objetivo deportivo.

Después de entrar al Olimpo del fútbol sudamericano como entrenador del Independiente del Valle de Ecuador ganando la Copa Sudamericana 2019 y la Recopa en 2020, este entrenador de 37 años de edad se puso al mando por un periodo breve del Inter de Porto Alegre en Brasil, antes de tomar las riendas del Charlotte FC.

Asumió las riendas

Con otras ofertas, un éxito incuestionable a sus espaldas y bastante de donde tirar, el coach nacido en Las Palmas, España, decidió que lo mejor para su joven y prominente carrera sería ir al Charlotte FC, donde todo era campo y no había absolutamente nada.

En una entrevista a Radio MARCA, Ramírez contó que cuando llegó, fue consciente del ‘lío’ en el que se había metido:

“No fui muy consciente hasta que llegué aquí y me di cuenta de la realidad que había. Cuando llegué… me di cuenta de lo complicado que iba a ser”.

Aun así, afirma que eso le motivó, y que lejos de deprimirse se sintió entusiasmado de estar inmerso en una nueva experiencia:

Lo vi como una oportunidad, un reto… no solo por el club, sino también por ser la MLS. Primero llegar a un vestuario donde no hay nadie”.

Pocos elementos

También confesó que al desembarcar en el Charlotte, tenía a su disposición muy pocos jugadores y que a partir de ahí sabía que venían días duros y llenos de obstáculos:

“Había sólo seis jugadores fichados cuando firmo yo, así que sólo había seis jugadores y yo en el vestuario. A partir de ahí empieza un camino muy largo en el que hay varios episodios en el camino como el ‘Expansion draft’, en el que tienes derecho a elegir 5 futbolistas de otras franquicias que no hayan sido protegidos por su club, y luego teníamos el ‘Super draft’, que era la posibilidad de escoger futbolistas de la universidad… y por último empezar a negociar”.

Llegó el éxito

La aparición del conjunto celeste y blanco dentro del circuito norteamericano ha sido un ‘boom’ en todos los aspectos. Por ejemplo, en su primer partido como local batieron el récord de asistencia de la liga, albergando a 74.479 aficionados en el Bank of America Stadium.

Las alegrías a nivel deportivo tardaron un poco más, pero igualmente, aparecieron. Tras caer en sus 3 primeros cotejos, el cuadro que dirige Miguel Ángel Ramírez ha hilvanado par de triunfos al hilo, jugando cada vez mejor y de manera más efectiva.

Sin lugar a dudas, una historia que merece ser contada y que probablemente, tendrá muchos más capítulos en el futuro.