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Ramón Hernández definitivamente ha sido y sigue siendo el Factor X de los Tigres del Licey. Su presencia en el lineup es tan determinante que cuando menos lo esperan saca una de la chistera y hace su magia. Eso ocurrió la noche del viernes en el estadio Quisqueya Juan Marichal.
Con tres en circulación, en la parte baja del tercer episodio, Hernández le pescó una recta a Raffi Vizcaíno con tres en circulación para barrer las bases con un Grand Slam y guiar la victoria de los Tigres del Licey 4-1 sobre las Estrellas Orientales.
Con este triunfo, los azules se consolidan como líderes de la tabla de posiciones. Quedan ahora con récord de 29-13, un juego por encima de las Águilas Cibaeñas. Durante 3 horas y 1o minutos, y con una agradable temperatura de 27 grados centígrados una buena cantidad de público se congregó en las tribunas del Coloso del Ensache la Fe.
La victoria fue para César Valdez (5-0), la derrota recayó sobre Yannsy Díaz (1-2) y el juego salvado fue para Jairo Asencio, quien llega a 12 rescates en la temporada.
Y eso que los petromacorisanos conectaron más hits que los felinos, pero no pudieron concretar; estuvieron a ley de un batazo para sacar del morrito a Valdez, mas no lo lograron. Dejaron que el veterano se creciera en el montículo y después de 6.0 entradas de labor, permitió seis hits, pochó a otros tantos y sólo le pudieron anotar una sola carrera.
Los elefantes se fueron de 7-0 con nombres en posición anotadora y dejaron hasta ocho hombres en circulación. Mientras que los dueños de casa solo necesitaron tres sencillos y un jonrón par acabar con las aspiraciones de los siderales.
Las Estrellas dejan su récord en 19-24, pero se aferran al cuarto lugar, luego de las derrotas de Toros del Este y Leones del Escogido. Estos últimos llegaron a 30 derrotas y ya están a solo una victoria de los estelares para quedar oficialmente eliminados de la temporada.
Por los visitantes, Edward Olivares fue sumamente importante. El venezolano cosechó un par de tubeyes para llegar a nueve dobles en la temporada. Se fue de 4-3 y puso su average en .294.
Licey aprovechó al máximo las oportunidades que le dieron. Y luego, del séptimo inning en adelante no pudieron los bates contrarios hacerle nada el bullpen de los felinos, hasta ahora el mejor de la liga.