En el Real Madrid todavía continúa la resaca por la celebración del titulo de LaLiga en el que se consagraron con cuatro fecha de anticipación tras el triundo 4-0 a Espanyol en el Bernabéu. Pero el tiempo apremia y los de Carlo Ancelotti deben focalizarse en el duelo de entresemana ante el Manchester City en el que deberán remontar la semifinal de Champions League (3-4 en la ida).

Y justamente, el máximo torneo europeo es un objetivo que pondría al conjunto merengue en la cima del continente nuevamente y sería el factor clave para terminar de convencer a Kylian Mbappé de fichar por ellos. Y en Madrid ya tienen un plan para cerrar las cuentas.

El modelo de plantilla corta de Ancelotti, sin muchas rotaciones y con un peso muy importante de una columna vertebral formada por ocho jugadores, ha funcionado. Courtois, Militao, Alaba, Casemiro, Kroos, Modric, Vinicius y Benzema han pasado de 1.800 minutos y han sido, con diferencia, los futbolistas más utilizados de la plantilla.

A su vez, esa gestión del italiano ha ido dejando sin hueco a otros miembros de la plantilla que este verano deberán buscarse un nuevo acuerdo lejos del Bernabéu. Y no se trata de jugadores de poco peso, sino de peces gordos que han tenido historia en el club.

Marcelo, Isco y Gareth Bale son tres de los jugadores que finalizan contrato con la institución merengue a final de esta temporada y no parece que haya intenciones de renovar el vínculo. Por lo tanto, el margen salarial que deja el ahorro de los tres contratos, sería suficiente para poder ofrecerle a Mbappé un jugoso acuerdo que compita con lo que quieren darle en París para que se quede en Francia.

El sprint final no será sencillo, con los jeques de la entidad parisina intentando convencer al galo y a su entorno para firmar un contrato millonario de un par de temporadas y asegurarse así su presencia en el Mundial de Qatar con la camiseta azul del campeón de la Ligue 1