La Copa del Mundo Qatar 2022 está a punto de comenzar y las historias particulares de los equipos empiezan a enriquecer los libros de esta edición. Los hermanos Williams protagonizarán una de las historias más curiosas del Mundial, ya que nacieron en el mismo lugar pero representarán a diferentes países en la Copa del Mundo en el país asiático.

Iñaki y Nico Williams son dos hermanos que comparten el mismo origen: son hijos de padres ghaneses que emigraron a España como refugiados. Ambos nacieron en Europa y forjaron su carrera en el Athletic de Bilbao, donde aún juegan compartiendo delantera. Iñaki con la 9 y Nico con la 11.

Iñaki, de 28 años, ya es un histórico del equipo vasco y fue llamado en 2016 para disputar un amistoso con la selección española. Pero finalmente, a mediados de 2022, comunicó que representará internacionalmente a Ghana, la tierra de sus padres.

Nico, por su parte, es ocho años menor. Pero aún así comparte delantera con Iñaki en LaLiga y con apenas 20 años ya es uno de los jugadores más destacados del país, al punto que ya hizo todo el recorrido en selecciones juveniles hasta llegar a la mayor de España.

Iñaki cuenta que tomó la decisión de jugar para Ghana tras un viaje que hizo al país antes de la pandemia: “Pude conocer los valores y la identidad de mis padres y eso estará siempre en mí. Quiero devolver a Ghana lo que nos ha dado a mi familia”, reconoció.

Ambos fueron convocados para Qatar 2022 y, si bien no se enfrentarán en la fase de grupos, un cruce en la segunda ronda puede ser posible. Así, imitarían el caso de los hermanos Boateng, los únicos que se han enfrentado entre sí en una Copa del Mundo. Y lo han hecho dos veces.

Jerome y Kevin-Prince Boateng nacieron en Alemania. Su padre Prince, ghanés, tuvo dos relaciones con mujeres alemanas y de ahí nacieron sus hijos, por lo que en realidad Jerome y Kevin son medio hermanos y no compartieron mucho ya que fueron criados por sus respectivas madres.

Prince abandonó a ambos y los hermanos Boateng se criaron en entornos muy diferentes, desarrollando personalidades distintas. Jerome, optó por representar a Alemania, el país de su madre. Pero Kevin-Prince, rebelde, eligió a Ghana, el pais de su padre ausente.

Ambos se enfrentaron en el Mundial de Sudáfrica 2010 en la segunda fecha del Grupo D en la que Alemania ganó 1 a 0. Curiosamente, cuatro años después en Brasil 2014, volvieron a cruzarse. Por el Grupo G, empataron 2 a 2. Alemania, con Jerome, ganaría el Mundial.