Aunque el dinero es importante para la construcción de buenos equipos de fútbol, no lo es todo. Eso quedó demostrado ayer en la Copa de Francia, cuando un humilde Niza sacó contra todo pronóstico al todopoderoso y favorito PSG del argentino Lionel Messi.

A pesar de tener la mayor cantidad de tiempo la posesión del balón, el conjunto parisino no pudo traducir eso en peligro sobre el arco rival y tuvo que definir la eliminatoria desde el manchón penal, en el cual no tuvo el aplomo suficiente y terminó cediendo.

Un partido trabado

El compromiso que se llevó a cabo en el Parque de los Príncipes, casa de la escuadra que dirige Mauricio Pochettino, tuvo una tónica lenta y poco fluida durante prácticamente todo su desarrollo. Pocas fueron las ocasiones de gol que se generaron.

Tan baja fue la producción ofensiva de ambos equipos que incluso, el PSG solo llegó a patear 2 veces entre los 3 palos del cuadro visitante.

No obstante, el Niza no se amilanó y bajo sus propios métodos intentó llegar al gol en el tiempo reglamentario, pero tampoco tuvo éxito, por lo que hubo que recurrir a la definición desde los 11 metros.

Lionel Messi anotó… pero Simons no

Como si de un mal chiste se tratase, el hombre que falló el penal decisivo fue un exbarcelonista: Xavi Simons. Parece que los amargos momentos que marcaron la última etapa de Leo en el Barcelona están de vuelta para hacerse recordar una y otra vez; estando presentes en esta ocasión en la figura de un canterano culé.

¿Qué sigue a partir de ahora?

Con un flojo rendimiento a nivel futbolístico en todas las competencias y tras esta eliminación prematura en la Copa de Francia, al Paris Saint-Germain no le queda otra que aguardar por los octavos de final de la Liga de Campeones de la UEFA e intentar eliminar al Real Madrid para limpiarse la cara ante sus aficionados.

Por su parte, Lionel Messi sigue estando en deuda con unos seguidores que esperaban mucho de él y sin embargo han obtenido muy poco.