La huida del dictador Ben Alí, allá por 2011, debió suponer una era de cambios profundos en Túnez y por ende de marcada apertura hacia los patrones democráticos enarbolados por la tradición occidental.

El suceso fue la chispa que desencadenó en la llamada “Primavera Árabe”, el proceso marcado por sucesivas revueltas populares que dio al traste con el fin de gobiernos de corte autoritario, como el del mencionado Ben Alí en Túnez, además de Hosni Mubarak en Egipto y Muamar el Gadafi en Libia.

En el caso de Túnez, tras la salida de Ben Alí, en un primer momento se sucedieron importantes transformaciones en el ámbito político, desde el mismo instante en que se convocaron a elecciones presidenciales.

Los viejos fantasmas del pasado

El sueño parecía volverse realidad, pero en 2019, con la llegada a la presidencia de la nación árabe del populista Kais Said, comenzó un período de retroceso que ha sumido al país en un tenso clima político con matices muy similares a la época dictatorial bajo la égida del mencionado Alí.

Luego de que el 25 de julio de 2021, el presidente Said, se otorgara plenos poderes, amparado en la Constitución de 2015, regresaron los peores fantasmas del pasado y el acentuado sesgo autoritario del nuevo gobierno ha impactado en todos los ámbitos de la sociedad, incluyendo el deporte y de manera particular el fútbol.

La noticia

En este contexto a menos de un mes para el comienzo del Mundial de Qatar, trascienden las recientes declaraciones del ministro de Juventud y Deportes de Túnez, Kamel Deguiche, quien ha amenazado en reiteradas oportunidades con disolver las oficinas de la FIFA en la nación magrebí, tal como reseñan medios internacionales como la agencia española EFE.

La actitud de Deguiche conllevó a una respuesta del máximo ente futbolístico a nivel internacional, la FIFA, que emitió un comunicado en el cual considera las declaraciones del funcionario como un intento de intromisión en el funcionamiento de la Federación de Fútbol de Túnez.

En este sentido, la FIFA ha pedido que se aclare esta situación que viola uno de los estatutos de la organización en lo referente a que las asociaciones miembros están obligadas a funcionar de forma independiente y sin la influencia indebida de terceros.

Al respecto, la agencia AFP señaló que el director de asociaciones miembro de la FIFA, Kenny Jean – Marie, aseveró mediante una misiva al presidente de la federación tunecina, sobre la posibilidad de imponer sanciones en caso de confirmarse la violación de los reglamentos.

¡Sin Mundial!

La noticia ha causado revuelo en el ámbito deportivo, pues el asunto deja asentada la probabilidad de que la selección de fútbol de Túnez, las conocidas “Águilas de Cartago” pueda quedar fuera del Mundial de Qatar.

Hasta ahora no hay nada confirmado, pero sin dudas sería un duro golpe para una escuadra que se apresta a participar en su sexta justa del orbe, desde que obtuviera su clasificación por primera vez al certamen organizado por Argentina en 1978.

El debut de Túnez está pautado para el venidero 22 de noviembre frente a Dinamarca, como parte de las acciones del grupo D, donde también medirán fuerzas ante los combinados de Francia y Australia.