El capitán de la selección de Dinamarca, Christian Eriksen, fue invitado a la final de la Eurocopa, que se celebrará en el estadio de Wembley de Londres este domingo, después de sufrir un paro cardíaco en el primer partido del torneo hace unas tres semanas.

Eriksen tuvo que ser reanimado por RCP durante el partido que Dinamarca disputó con Finlandia el 12 de junio en el Parken Stadion de Copenhague, y posteriormente se le colocó un desfibrilador cardioversor implantable (ICD).

La UEFA confirmó que el presidente Aleksander Ceferin ha invitado a Eriksen, de 29 años, y a su pareja a la final de Wembley, aunque aún no está claro si asistirá.

Dinamarca, sin Eriksen, se medirá a Inglaterra en una de las semifinales en Londres este miércoles.