Las marcas están para romperse, suelen decir. Pero hay récords que, por más que uno quiera, parecen difíciles o hasta imposible de superar, más por una cuestión de sentido común. Pero el fútbol da para todo y cada vez los jugadores llegan al profesionalismo a una edad más temprana, abriendo un debate que seguramente deje conclusiones interesantes.

Al margen del debate, lo cierto es que en la jornada del domingo, parte de la Fecha 8 de la Premier League, se produjo el debut de un jugador de apenas quince años. Si, un adolescente más cerca de la edad de inicio de la secundaria que de la adultez. El jugador en cuestión es Ethan Nwaneri, que se calzó la camiseta de nada menos que el Arsenal y entró en el primer minuto de adición cuando se equipo goleaba 3-0 al Brentford a domicilio.

Si bien “jugó” apenas dos minutos y su ingreso fue más para la estadística y el récord, cabe destacar que Nwaneri es una de las joyas de la cantera del equipo londinense y su debut estaba previsto desde hace tiempo, dado su potencial. También, es cierto que su presencia en el banco de suplentes se dio por varias bajas que el entrenador Mikel Arteta tuvo en su equipo y que el resultado motivó que Ethan ingresara al campo. Pero, ¿era necesario?

Con su ingreso, el inglés rompió el récord de Harvey Elliott, del Fulham, que en 2019 se estrenó con 16 años recién cumplidos. Como curiosidad, Ethan nació en marzo de 2007, ocho meses después de la apertura del Emirates Stadium, la casa de su equipo. Es decir, Nwaneri es más joven que el famoso recinto del equipo Gunner, que reemplazó al mitico Highbury a partir de 2006.

De esta forma, Ethan será un nombre que pocos olviden dada su precocidad, lo que puede ser contraproducente para su carrera. Será inevitable para la prensa seguir de cerca el rendimiento de un chico que, con apenas quince años, será presionado para rendir en el equipo y corresponder su debut tan temprano.

Nwaneri viene teniendo actuaciones muy destacadas tanto en el equipo Sub-18 del Arsenal como de la selección inglesa. Es considerado por la prensa como una de las grandes promesas del fútbol de ese país y con este debut, su presencia en los medios será mucho mayor, por lo que es difícil no pensar en si la decisión de Mikel Arteta de hacerlo debutar fue correcta o no.

No hay que olvidar casos como el de Freddy Adu, quien debutó en la MLS con apenas 14 años de edad, al que llamaban “el nuevo Pelé”. Luego de firmar contratos millonarios con su equipo y patrocinadores, con 18 años dio el salto a Europa y su carrera se estancó producto de innumerables cesiones. Con apenas 33 años, hace varias temporadas que juega en lugares exóticos como Grecia, Turquía, Serbia o Finlandia sin asentarse en ninguno.

Hace poco tiempo, también surgieron cracks precoces como el croata Alen Halilovic, quien debutó en su país a los dieciséis y a los dieciete ya había jugado en la selección. Muchos gigantes europeos se peleaban por él y finalmente el Barcelona lo compró. Nunca se asentó en el equipo culé, fue vendido dos veces y cedido de equipo en equipo. A los 26, regresó a la liga croata con pocas opciones de repuntar su carrera.

La obligación del Arsenal en este momento, es llevar de a poco a Ethan. Que el debut sea una simple anécdota pero que su nombre vaya de a poco, muy de a poco, metiéndose en el primer equipo. Con apenas quince años es muy temprano para las exigencias del ámbito profesional y los resultados. Los expertos consideran que, incluso, los jugadores menores de veintiún años, aún no maduraron del todo. Claramente hay excepciones, pero son las menos. No hay que arriesgar con Nwaneri