Los eSports son un mercado que no para de crecer a pasos agigantados. Por lo que un simple videojuego puede tener un impacto tan grande en una empresa, que un simple cambio puede generar un éxito o un fracaso en un abrir y cerrar de ojos.

La decisión de Konami de cambiar el enfoque de la tradicional saga Pro Evolution Soccer (PES) y convertirlo en un juego “Free To Play” llamado eFootball causó un revuelo tanto antes del lanzamiento, como después del mismo, luego de las pésimas críticas que tuvo la primer versión que vio la luz.

Pero no será el único cambio que los usuarios tendrán que soportar, ya que el otro simulador de fútbol que dominó en todas las consolas del rubro también podría sufrir un cambio rotundo en cuanto a su denominación.

FIFA, además de ser el máximo ente del fútbol, es el nombre que ha tenido la franquicia de videojuegos del deporte hecha por la compañía EA Sports, desde mediados de la década del noventa, cuando salieron las primeras ediciones del mismo.

Pero ahora, con los cambios en la manera de jugar y como los videojuegos se han convertido en un negocio aparte, la empresa ha decidido tomar un camino propio y está planeando despegarse del nombre FIFA en futuras ediciones del juego.

En un comunicado que EA Sports dio a conocer, expresó: “La idea es seguir ampliando la experiencia futbolística dentro del videojuego. Para ello pensamos en nuevas plataformas y en un compromiso con todos los niveles deportivos. Incluidas las bases, donde también entra la ampliación del fútbol femenino”.

FIFA 22 lleva prácticamente una semana en las tiendas, aunque salió días antes de manera anticipada para las reservas de la Ultimate Edition. Desde el lanzamiento ya han pasado por el juego 9,1 millones de jugadores. Todos ellos han construido 7,6 millones de equipos en FIFA Ultimate Team y han jugado 460 millones de partidos.

No hay dudas de que la competencia, tras el fracaso de eFootball, es muy débil. Pero para EA Sports es momento de tener identidad propia y han decidido alejarse de FIFA para tener un camino propio, sin perder las licencias dentro de cada edición del juego.