Los Yankees de Nueva York sorprendieron al mundo cuando anunciaron su nómina para enfrentar a los Guardianes de Cleveland por las Series Divisionales de la Liga Americana edición 2022. En ella brillaban por su ausencia nombres que tiempo atrás eran estelares dentro de la organización, tales como el de Aroldis Chapman y DJ LeMahieu (sin contar la falta de Andrew Benintendi, quien llegó con bombos y platillos desde los Royals antes de la fecha límite de cambios).

Las razones en ambos casos son diversas, pero ciertamente el nombre que más ruido hacía en la cabeza de los fanáticos y entendidos de este deporte era el de DJ. ¿Cómo es que uno de los bateadores más consistentes del juego en los últimos años no iba a estar con su club en la hora cero?, era la gran pregunta que taladraba la sien de los seguidores yankistas.

Ocurrió lo impensado

Lo concreto es que así fue y por fuera se quedó. Hasta ahora, la decisión de Aaron Boone podría no tener mayores consecuencias siempre y cuando los Mulos del Bronx consigan hoy su pase a la siguiente instancia en un quinto y decisivo duelo ante la novena dirigida por Terry Francona.

Sin embargo, vale la pena hacer un análisis de la situación y ponderar si no incluir a LeMahieu fue o no un acierto por parte de los Bombarderos y más allá, estudiar si hacerlo de cara a una hipotética Serie de Campeonato contra los Astros de Houston es o no una buena alternativa.

¿Por lesión o por rendimiento?

A pesar de que el reporte oficial dice que el ex de los Rockies de Colorado no hizo el equipo por una inflamación del segundo metatarsiano derecho, algunos elucubran que hay ‘gato encerrado’. Alegan que fue el mánager en conjunción con la directiva quien quiso execrarlo por temas de bajo rendimiento.

Y sí, DJ LeMahieu no ha sido el mismo de otros años, pero aun así las estadísticas avanzadas dicen cosas buenas de él. Por ejemplo, sigue siendo un golpeador constante y un tomador de bases por bolas relativo, habilidades que no puede ofrecer otro miembro dentro del club house de los Pinstripes.

Esta habilidad para poner la bola en juego y embasarse contrasta muy bien con la facilidad con que se ponchan Aaron Judge, Giancarlo Stanton y Gleyber Torres. En definitiva, tenerlo incrustado entre ellos debería lógicamente permitir la producción de carreras con mayor frecuencia, algo que no parecen haber sopesado los Yankees.

Hasta el momento, los Yankees no han pasado de 5 rayitas en ninguno de sus 4 juegos contra los Guardianes y promedian 3.75 carreras por encuentro, lo que puede considerarse bastante bajo para una escuadra cuya media fue de 4.98 anotaciones por compromiso al término de la fase regular.

Entonces, vale la pena cuestionarse: ¿Se equivocaron los Bombarderos al no incluir al utility de 34 años en su listado? Y también hay que preguntarse: ¿Deberían inscribirlo si llegan a la Serie de Campeonato? Son interrogantes sobre las que deberían reflexionar Boone y Cashman.