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Mientras se sigue acercando la fecha para que se reporten los primeros jugadores (receptores y lanzadores) a los campos de entrenamiento de las Grandes Ligas para dar comienzo al Spring Training 2023, es este un buen momento para hacerse una pregunta respecto a los Yankees de Nueva York: ¿Cuándo comenzó la tragedia del jardín izquierdo que perdura hasta nuestros días?

Para nadie es un secreto que desde hace ya una buena cantidad de tiempo el cuadro de la Gran Manzana presenta una debilidad grave en la posición 7. Sin embargo, son pocos los que recuerdan en qué punto de la historia esto comenzó a ser así, motivo por el cual es preciso hacer un poco de ejercicio memorístico.

Corría el año 2021 y estábamos en el mes de marzo, en aquella época Clint Frazier pintaba para ser el dueño del bosque izquierdo de los Mulos del Bronx y todo apuntaba a que se consolidaría poco a poco en el puesto. Incluso, su mánager Aaron Boone llegó a declarar por esas fechas: “Especialmente con las mejoras que ha hecho en todos los aspectos de su juego, a su edad, su experiencia ahora y su éxito y confianza que ha seguido construyendo lo han puesto en una posición para entrar en este campamento como un jugador cotidiano. Ciertamente se lo ha ganado”.

Y así fue una vez iniciada la zafra, pero en junio el chico que a día de hoy tiene 28 años de edad fue retirado de un cotejo por mareos y todo se fue a pique. Los problemas en su cabeza persistirían y el peligro de conmoción cerebral impidió que volviera al terreno con el uniforme a rayas. Su carrera se hundió y no mejoró en el 2022 con los Cachorros de Chicago.

Por su parte, los Yankees recurrieron a Aaron Hicks, una alternativa que venía en caída libre, lo que les obligó en el 2022 a recurrir a los servicios de Andrew Benintendi, un jugador que tampoco brindó los resultados esperados luego de un arranque lento y dubitativo.

La obsesión del gerente Brian Cashman por agregar un bateador zurdo que se hiciera cargo del left field se hizo aún más evidente, lo que condujo a la utilización del novato Oswaldo Cabrera, un muchacho talentoso que batea en ambos lados del plato, pero al que claramente le falta experiencia.

Y de esta manera llegamos a la fecha actual, misma en la que suenan agentes libres como Jurickson Profar y David Peralta, así como también un intercambio con los Mellizos de Minnesota para obtener a Max Kepler, mas no hay nada concreto. El dilema persiste, los días avanzan y los Yankees se conducen a una situación de duda y atribulación.

¿Se atreverán los Bombarderos a lidiar con un problema tan delicado durante toda la temporada o lo solventarán justo antes de entrar a los entrenamientos primaverales? La respuesta a esta pregunta es complicada y prácticamente nadie sabe qué estén tramando en las oficinas del Yankee Stadium. Amanecerá y veremos.