Definitivamente, Vladimir Guerrero Jr. es toda una celebridad, de eso no cabe la menor duda. El chico de los Azulejos de Toronto no solo puede batear y atajar como lo que es, un pelotero de élite, sino que también sabe cómo robarse el show fuera y dentro de los diamantes. Sin embargo, la relación de amor y odio que tiene con la entrevistadora filipina-canadiense, Hazel Mae, ya es cosa de otro nivel. La mujer de 52 años ya solo se ríe ante las peripecias del dominicano.

En el Rogers Centre, casa de los Blue Jays, se ha convertido en toda una tradición desde hace un tiempo para acá los baños con los enormes dispensadores de líquido que hay en el dugout. Ya no importa que sea agua, jugo o bebidas energizantes, lo importante es que siempre alguien acaba empapado. Lo mejor de todo es que no solo se limita a beisbolistas la ducha obligada, sino que puede trascender hacia cualquiera que se encuentre cerca, incluida la reportera Hazel Mae, víctima favorita de Vladdy Jr.

2 bañadas consecutivas

Por pizarras consecutivas de 5×3 y 4×1, los Pájaros Azules despacharon en los días sábado y domingo a los Tigres de Detroit en condición de locales. Al finalizar los cotejos, Mae saltó al terreno para obtener las declaraciones de los protagonistas, es decir, de Teoscar Hernández el sábado y de Matt Chapman hoy.

Lo que no contaba Hazel es que saldría mojada sí o sí. Su cazador, un muy divertido Guerrero Jr. solo estaba esperando el momento justo para acudir a la cita como ya costumbre. El ritual siempre es el mismo, el inicialista le pega su chapuzón al compañero de turno y luego a la comunicadora, aunque algunas veces ha sido en simultáneo.

Así es, en Toronto hay un peligro suelto con un barril cargado de hielo en las manos y es quisqueyano.