Al momento de escribir este texto, los Marineros de Seattle ocupan el primer puesto de comodín en la Liga Americana con marca de 66-54 y registro de 7-3 en los últimos diez juegos disputados, el mejor de su división.

La idea de regresar a postemporada veintiún años después sigue siendo una obsesión para el presidente de operaciones de los Marineros, Jerry Dipoto, quien apostó todo en la fecha limite de cambios al hacerse con los servicios del sensacional Luis Castillo; un lanzador subestimado, no por su indudable calidad, sino por jugar en un equipo perdedor como los Rojos de Cincinnati.

El movimiento sorprendió a todos, pues la mayoría de los entendidos ubicaban al dominicano Castillo en la órbita de los Yankees de Nueva York, pero Dipoto sacrificó a cuatro de sus mejores prospectos y llevó a Seattle al quisqueyano.

Un debut a lo grande

El derecho de 29 años irrumpió por todo lo alto con su nuevo equipo y en el mismo Yankee Stadium hizo de las suyas frente a los Mulos caminando siete entradas a un ritmo atronador.

“… La determinación que mostró ese día, lanzando contra el que en ese entonces era el mejor equipo del béisbol, fue algo impresionante…  ”- sentenció Dipoto en su charla semanal con Mike Salk de Seattle Sports 710 AM.

En sus primeras tres aperturas, Luis Castillo estableció la marca de mas ponches en las primeras tres salidas para un lanzador de Seattle, que databa de 1982 y muchos en el estado de Washington y más allá comenzaron a hablar de un nuevo “Rey” en clara alusión a Félix Hernández.

Confianza total

Como sea, Dipoto y la fanaticada de los Marineros confían en Castillo y en el equipo y todos saben que las opciones de la escuadra para definir el boleto a la postemporada pasan por el buen rendimiento de su rotación, afianzada con Robbie Ray, Logan Gilbert, Marco González y George Kirby, además de Luis Castillo, pero el presidente reconoce que el caribeño jugará un rol protagónico en este tramo de 40 partidos, así como el los Play Off.

“… Es realmente bueno y ha pasado desapercibido, siendo dos veces All Star; siento que lo hemos adquirido en el mejor momento, ahora mismo está en la cúspide de su carrera…”- reafirmó Dipoto.

Aquellos 16 juegos ganados por el equipo de 2001 representaron como una especie de maldición, pues han pasado más de dos décadas sin estar en postemporada, no obstante, todo indica que en 2022 e hechizo podría romperse y República Dominicana diría presente, pues si bien la figura de Luis Castillo se impone por su consistencia, el juego del novato sensación Julio Rodríguez, también promete mucho más, pero esa es otra historia.