Cuando parecía que las malas noticias para Fernando Tatis Jr. habían pasado y que ya las cosas comenzaban a calmarse en su agitado día a día, los hechos de ayer llegaron para afirmar lo contrario. Luego de estar alejado de los terrenos por múltiples lesiones y de batallar contra ellas largo tiempo solo para terminar cayendo en la desgracia del uso de sustancias prohibidas, ahora la estrella de los Padres de San Diego tiene que lidiar con un problema más: las burlas.

Ciertamente existe una rivalidad muy marcada entre los Dodgers de los Ángeles y los Frailes desde hace un buen tiempo en la División Oeste de la Liga Nacional. El enfrentamiento entre ambas novenas ha tenido capítulos bastante vibrantes que son recordados todavía a día de hoy, pero lo que tuvo lugar ayer en el Dodger Stadium, casa de la tropa azul, fue muy triste.

No tuvieron piedad

En las inmediaciones de la parte baja del quinto episodio, justo cuando los visitantes ganaban por marcador de 4×0, algo muy extraño y oscuro sucedió en lo profundo de los jardines. Desde la tribuna fue lanzado al terreno una especie de barril que tenía enfrente las siglas PED, las cuales significan Performance-Enhancing  Drug, lo que literalmente se traduce al español como ‘drogas para mejorar el rendimiento’.

El objeto fue rápidamente retirado del estadio por una de las trabajadoras del mismo, pero las cámaras de televisión lograron captarlo perfectamente y a decir verdad, el daño ya estaba hecho. Esta era una clara alusión a lo ocurrido con Fernando Tatis Jr., quien recientemente dio positivo por clostebol, una sustancia prohibida por MLB debido a que representa una ayuda deportiva para quien la consume.

Hubo venganza

Aunque la situación fue bastante lamentable y causó molestia en los más sensibles, lo cierto es que los Padres hicieron justicia derrotando por amplia pizarra de 7×1 a los Dodgers en su feudo. Esto les sirvió para poner su récord en 74 victorias y 59 derrotas y continuar en la búsqueda de un cupo en los playoffs.