Todo lo que sube, tiene que bajar y esa es la premisa que está pasándole por la cabeza a Robinson Canó uno de los peloteros más importantes para la República Dominicana en los últimos años.

El quisqueyano fue oficialmente despedido debido a su rendimiento de los Mets de Nueva York. El toletero venía con una “mala fama” desde la campaña pasada la cuál no pudo jugar debido al consumo de sustancias prohibidas. Este error, para Canó le pudo costar mucho más que los 24 millones dólares que perdió el año pasado.

Los Metros confirmaron la salida de Canó en su reporte de prensa antes del juego dominical, posteriormente el mánager Buck Showalter afirmó a los medios de la Gran Manzana la noticia.

Canó  bateaba para un paupérrimo .195 (8 hits en 41 turnos) con un cuadrangular, tres impulsadas y un OPS de .501 en 43 apariciones al plato con los líderes de la División Este de la Liga Nacional.

Debido a las exigencias que tiene Steve Cohen, dueño del equipo con sus jugadores, dichos números deportivo no serán aceptados por su novena y mucho más cuando vienen de escándalo por el uso de sustancias.

El camarero ahora tiene las posibilidades de firmar con cualquier otro club de las Grandes Ligas y para ficharlo deberán pagarle por dos temporadas un salario inferior al millón de dólares debido a que los Mets terminarán pagándole lo que le deben que son casi 250 millones de billetes verdes.

El toletero se convirtió en otro nefasto trato para Nueva York. En su tiempo por Queens el de la República Dominicana dejó los siguientes números; 168 juegos jugados, promedió para .269 con 24 jonrones, 72 impulsadas y un OPS de .765.