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Tradicionalmente, el mejor fútbol de Centroamérica y el Caribe ha tenido un solo nombre o, mejor dicho, un solo país: México. Es cierto que en los últimos años han crecido muchas selecciones como las de Estados Unidos, Canadá, Costa Rica y varias más, pero, a decir verdad, el balompié que paraliza la CONCACAF y enamora a la gran mayoría es el de la tierra de Pancho Villa.

No importa si hablamos de clubes o naciones, las grandes esperanzas de la parte alta del continente americano están depositadas siempre en los jugadores y el combinado tricolor, eso seguro. Sin embargo, los últimos años han visto un claro descenso en el nivel de juego de las divisas aztecas y al mismo tiempo, de sus atletas.

Una prueba de ello es que a día de hoy Irving Lozano del Napoli italiano es probablemente el hombre mejor posicionado en Europa con el que cuentan, mientras que en años anteriores llegaron a tener a Javier ‘Chicharito’ Hernández en clubes como el Manchester United y el Real Madrid. Pero hay una realidad mucho más profunda que merece ser observada.

Históricamente siempre ha existido un señalamiento hacia el elenco mexicano y es que, según muchos especialistas y amantes del juego, este se ha visto favorecido por su posición geográfica. Más específicamente, hay quien afirma que la fama y el prestigio acumulado hoy por los de verde, rojo y blanco, no sería el mismo si compitieran en CONMEBOL ante las 10 escuadras más bajas del mapa continental.

Resultados inapelables

Si esa conjetura de que México no está a la altura de Sudamérica es verídica o no, nadie lo sabe. No obstante, hay estadísticas que no dejan muy bien parado al cuadro de los manitos. Por ejemplo, la de hoy contra Argentina por marcador de 2×0 fue la décima derrota de El Tri frente a conjuntos de CONMEBOL en Copas del Mundo luego de 14 duelos.

Por otra parte, solo cuentan una victoria contra la potente confederación del sur de América, pero la misma fue hace más de 20 años (2×1 sometieron a Ecuador en Corea-Japón 2002). Esto abre una gran interrogante: ¿Nos han vendido a México como lo que no es? ¿O sí tienen los aztecas el gran nivel que se les atribuye? Es difícil responder a esa cuestión ya que habría que analizar otros múltiples factores, aun así, la realidad es que en la FIFA World Cup, Suramérica demostró ser demasiado para el fútbol mexicano.