Llegar a cuatro Series Mundiales en seis años, se dice fácil pero no, la épica de los Astros de Houston en este tramo de siglo XXI ya se erige como una de las grandes historias de todos los tiempos en el mejor béisbol del mundo.

Aquellos siete juegos ante los Yankees en 2017  para llevarse el banderín de la Liga Americana, luego otros siete ante los Dodgers y cuando todo apuntaba a una remontada, ganar el “bueno” allí en Dodger Stadium, después la polémica, la “ trampa”, el mentiroso AJ Hinch, más tarde en 2019, otra vez regresar al Clásico de Otoño para caer en siete partidos memorables ante los sorprendentes Nacionales de Washington y así, terminar con el “ viejo” Dusty Baker llegando para limpiar la imagen, dar un tono decente a la crisis del elenco sideral.

Y entonces, luego de quedar a las puertas en 2020, una vez más los Astros regresaron a la Serie Mundial para perder en 6 partidos ante los Bravos de Atlanta en 2021 y dar por sentada la leyenda.

Pasado y presente

Como para despejar las dudas y enterrar de una vez y por todas todo tipo de comentarios y especulaciones, llegó el 2022, un histórico 2022, 107 juegos ganados en temporada regular y luego en playoffs el invicto, par de barridas, primero ante Marineros de Seattle y  luego la humillación a los Yankees en medio del Bronx.

Los Astros de Dusty Baker regresan al Clásico de Otoño, sin Carlos Correa ni George Springer, pero con un soberbio pitcheo y el plus de las nuevas figuras, como son los casos de Yordan Álvarez y Jeremy Peña.

Los “últimos templarios”

Y sí, no estará ni Carlos Correa, tampoco George Springer, dos de los estelares de aquella “vieja guardia” de 2017, pero estarán Yuli Gurriel, Alex Bregman, José Altuve, además de Lance McCullers Jr y Justin Verlander, como los “últimos templarios” de aquella generación histórica, quizás como celosos guardianes de esa mística que identifica a los Astros en todo el planeta béisbol.

Tal como señala MLB Network, la estadística refiere que entre Gurriel, Bregman y Altuve suman en tres Series Mundiales, 12 jonrones y 35 carreras impulsadas para sentar una pauta determinante en estos años de gloria.

El sello de la casa

Si bien Altuve no ha encontrado el paso en estos playoffs, tenemos que Yuli Gurriel si ha descollado con el madero, bateando para 367 con 2 jonrones y 3 remolques, mientras que Bregman lo ha hecho para 333 con 2 vuelacercas y 7 impulsadas, dejando bien claro que es el sello de la casa lo que se impone.

Con el recuerdo imborrable de aquel título hace cinco años, los Astros saldrán desde este viernes a buscar reescribir su historia de la mano de los “últimos templarios” y como sea, será algo hermoso de ver, el terreno tiene la palabra pero son los grandes favoritos.