Lo que parecía una temporada de consolidación en las Grandes Ligas para José Siri, se está convirtiendo en una para el olvido. Los Astros de Houston anunciaron en las redes sociales que el dominicano fue enviado a Triple-A con el Sugar Land, que es la sucursal de la franquicia.

Los pobres números del patrullero en la primera parte de la campaña tuvieron consecuencias y ahora el pelotero deberá convencer nuevamente a la organización de Texas desde Las Menores. Además de eso, los dirigidos por Dusty Baker decidiron subir al jardinero Jake Meyers, quien fue activado de la lista de lesionados de 10 días.

Tras estar presente en el roster en la postemporada 2021 donde llegaron a la Serie Mundial ante los Bravos de Atlanta, Siri estaba en la expectativa de ser uno de los guardabosques titulares para la novena en la presente zafra, pero sus númeritos lo forzaron a perder ese puesto y también un lugar dentro del equipo grande.

El quisqueyano apenas bateó para .185 de average, nueve impulsadas, 18 anotadas, tres jonrones, seis bases robadas y 24 hits en 130 turnos al bate. Además de eso, dejó un bajo Porcentaje de Embasado (OBP) de .248.

Regañado por Baker

El criollo protagonizó una polémica tras conectar un gigantesco cuadrangular ante los Mets de Nueva York, el pasado martes, donde los Astros se llevaron la victoria. Fue un batazo kilómetro para el dominicano que no perdió la oportunidad de “perrearse” su bambinazo, cosa que no le gustó al manager Dusty Baker.

Debió haber corrido. Si estuviéramos en mis tiempos, al siguiente bateador lo hubiesen perforado con un bolazo, por eso debió correr, fueron las declaraciones del dirigente apenas le preguntaron por la celebración exagerada de Siri.

Sin duda, las palabras del mandamás de los Astros dejaron entrever que el estratega no ha estado contento con el desempeño del criollo en la presente campaña de Las Mayores.

Con la decisión de los de Houston, el objetivo de lograr establecerse en el mejor béisbol del mundo tendrá que esperar para el veloz outfielder.