El jardinero de los Nacionales de Washington, Juan Soto y Rafael Devers, de los Medias Rojas de Boston , son los mejores bateadores jóvenes del béisbol. Ambos son jóvenes para los estándares del béisbol, con Soto de 23 años y el toletero zurdo Devers dos años mayor. Ambos han acumulado cuatro años de tiempo de servicio y estarán en los años del premio mayor de arbitraje.
Soto rechazó recientemente un contrato de 13 años por $350 millones ya que su agente, Scott Boras, irá año tras año. Lo que Soto haga o deje de hacer está relacionado con Devers, y si ese contrato es rechazado, da una idea de lo que los Medias Rojas tendrán que poner sobre la mesa para obtener a Devers. Se han firmado otros contratos, como Fernando Tatis Jr., Mookie Betts, Francisco Lindor y Corey Seager, en la oferta de alcance de los Nacionales a Soto. Soto eventualmente podría estar en el rango de los $500 millones.
Betts se ha ido. La gerencia de los Medias Rojas y el equipo han logrado sobrevivir a esa pérdida, y las consecuencias en las relaciones públicas han sido mínimas. ¿La ferviente base de fans será tan indulgente si Devers se marcha?
Hay dos escenarios con Devers, y es simplista: le pagas o no. Los Medias Rojas también tienen la posibilidad, al igual que con Betts, de encontrar un socio comercial y desearle lo mejor a Devers dondequiera que vaya. Ciertamente, una parte del no es donde obtienes alguna compensación. Los Mets son ahora el equipo que cobra grandes salarios, que sigue siendo omnipresente cuando se buscan intercambios.
La era anterior a Bloom no demostró renuencia natural a firmar contratos extensos con enormes desembolsos de efectivo. Eso fue parte del éxito de cuatro campeonatos: voluntad de gastar, aceptar dinero muerto y desechar contratos que no estaban a la altura de las expectativas. El nuevo modelo ha reducido la exposición financiera y errores como el de Garrett Richards hacen mucho menos daño que el trato de David Price.
Los Medias Rojas han hecho propuestas a Devers, pero la seriedad es discutible. Reflexiono sobre el problema del contrato con Jon Lester, donde la gerencia hizo una oferta que finalmente fue aproximadamente la mitad de lo que firmó Lester. Hay puntos de partida para las negociaciones que no son insultantes.
Si el bloqueo se resuelve en las próximas semanas, la situación de Devers puede salir a la luz con la habitual ráfaga de especulaciones y rumores comerciales. Mi especulación es que diría que existen probabilidades favorables para que Devers sea canjeado si el equipo fracasa o muy posiblemente si no lo hace.