Su debut en Grandes Ligas fue por todo lo alto, ganando el anillo de Serie Mundial con los Medias Rojas de Boston en 2007 y no podía tener mejor manera de comenzar su camino en Las Mayores.
Daisuke Matsusaka había llegado a la Gran Catpa luego de rendir un mundo en Japón pero si algo lo lanzó con todo a la palestra, ese algo fue el Clásico Mundial.
Un situ
Hay una realidad, Ichiro Susuki fue el gran referente de Japón en los dos primeros Clásicos Mundiales en materia de ofensiva y liderazgo, más la figura de Daitsuke Matsusaka también merece todos los elogios y admiración.
El estelar derecho que brilló en la Gran Carpa con los Medias Rojas de Boston, fue el hombre grande de los nipones en las ediciones de 2006 y 2009.
Matsusaka se retiró del béisbol a comienzos de diciembre de 2021 luego de jugar en Grandes Ligas entre 2007 y 2014 pero su huella en los Clásicos, aún están palpables.
El legado
Para entender la dimensión de la figura de Daisuke Matsusaka hay que mirar a su récord de 6-0 y sí, el hombre no perdió en los Clásicos Mundiales.
En cada edición del evento, Matusasaka ganó 3 partidos y de ellos,sobre todo, juegos grandes como el de la final ante Cuba en 2006 y contra Estados Unidos en la semifinal del Clásico en 2009.
Además, el derecho compiló un excelente promedio de limpias de 1.95 con 23 ponches y 27,2 innings de labor.
Estos guarismos de Matsusaka lo sitúan en la cúspide del pitcheo en los Clásicos Mundiales, pues solo con dos participaciones ha registrado la más grande actuación de un serpentinero en estas lides.