Como si nunca se fuese ido. El derecho dominicano Edward Cabrera dio continuidad el jueves a su dominio desde que regresó de la lista de lesionados, con seis abanicados en cinco entradas y dos tercios en la victoria de los Marlins 3-0 sobre los Filis en el Citizens Bank Park, que detuvo en siete la seguidilla de triunfos de los locales.
“Me siento más seguro este año”, dijo Cabrera a través de un intérprete al finalizar el encuentro, que salvó la serie de tres juegos y envió a los Marlins de regreso a Miami con un récord de 2-4 en su gira por dos ciudades. “Confío en mis lanzamientos secundarios, en mi recta y en mí mismo. Es solo algo en general, me siento mejor”.
Cabrera, inició el primer y último partido de la gira, y ha lanzado 10.2 entradas en blanco en sus dos salidas desde la reinserción en la rotación de los peces. Permitió solo tres hits con cinco bases por bolas y 14 ponches en este lapso, demostrando que su éxito depende de cuan saludable esté y el mánager Don Mattingly lo sabe.
“Ha estado bien”, admitió el Mattingly tras la victoria del jueves. “Este es un niño que obviamente pasó por eso el año pasado. Creo que lo miras y, como todos ellos, van a mostrar algo sin importar si es bueno o malo. La experiencia de estar aquí, perder la forma [en el invierno] y saber que puede volver y competir lo hace ganar”.
Cabrera, de 24 años, comenzó tarde los entrenamientos de primavera debido a un problema en el bíceps, luego se perdió casi dos meses con tendinitis en el codo derecho y no parece tener un panorama alentador para su naciente futuro en MLB, lugar al que llegó en 2021, pero después de lidiar conun nervio inflamado que retrasó su debut hasta agosto.
De los tres hits permitidos a Cabrera el jueves, uno no salió del cuadro. El otro fue un medio swing que venció el cambio con dos outs en la segunda entrada para producir el último golpe que Filadelfia anotaría en su contra, reseñan los Marlins en su web.
Allí agregan también que cuatro de sus primeros seis outs fueron ponchados, elevando su conteo de lanzamientos a 43. Sin embargo, necesitó menos lanzamientos en la tercera (nueve) y cuarta (17) entradas, ya que Cabrera fue efectivo lanzando en las esquinas, particularmente en la zona. También pudo aprovechar que los bateadores se encimaban al plato.
“Simplemente estaba al mando de cada uno de sus lanzamientos”, confirmó el receptor Nick Fortes. “Tiene cinco lanzamientos diferentes que se mueven de diferentes maneras. Él estaba al mando de todos ellos. Les estaba dando un montón de miradas diferentes, y sus fallas fueron buenas fallas. Cada vez que falló, fue fuera del plato, no por el medio, por lo que sus fallas fueron fallas de calidad. Estuvo muy bien hoy”.
Después de entregar la pelota, Cabrera dio un golpe de puño a cada jugador de cuadro para expresar su agradecimiento por el trabajo que hicieron detrás de él, recordando que el dominicano ha lanzado hasta la sexta entrada en tres de sus cinco aperturas en 2022. Ha mantenido al oponente sin carreras en tres de ellas.