Desde antes de llegar a los Yankees de Nueva York, las expectativas sobre el lanzador derecho Gerrit Cole siempre fueron muy altas, y una vez que los Bombarderos se hicieron con sus servicios las mismas se dispararon todavía más.

Era el hombre de moda en aquel momento, por lo que aquel contrato por 9 años de duración y 324 millones de dólares estaba más que justificado según la gerencia del club de la Gran Manzana. No obstante, el tiempo ha pasado y sobre todo en los últimos tiempos, eso no parece ser tan así.

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Aunque en sus primeros 2 años con el uniforme a rayas el diestro ex de los Astros de Houston tuvo buenos números (récord de 23 victorias y 11 derrotas, con 3.11 de efectividad y 337 ponches en 254.1 entradas), su presente dista bastante de lo que se espera de un alguien como él.

En alguna ocasión se llegó a pensar que su problema era Gary Sánchez, y entonces se le colocó a Kyle Higashioka como catcher personal, pero las cosas se han profundizado más.

Algunos afirman que su caída se debe a que ya no usa sustancias para el agarre de la bola desde que la MLB las prohibió en mayo del 2021 y otros a que nunca fue lo que pintaron, pero lo cierto es que no da pie con bola. Sobre las sustancias ya hablamos (clic acá para ver nuestro artículo al respecto) y sobre su rendimiento actual lo haremos hoy.

La caída de un as

El 2022 no ha ido nada bien para el número 45 de los Yankees. Aunque no ha perdido, tampoco conoce la victoria en un cúmulo de 3 aperturas. Su peor versión ha salido a la luz, siendo vapuleado en las primeras 2, recibiendo 6 carreras y 8 imparables de los cuales 3 han sido jonrones en solo 9.2 innings de trabajo.

Sin embargo, hasta ahí su control no había fallado y algunos apuntaban a ciertos aspectos de su juego como indicios de un recuperación temprana, pero todo lo contrario. Ayer contra los Tigres de Detroit solo resistió 1.2 episodios, siendo el poco comando de sus envíos la tónica de su salida. Otorgó la misma cantidad de boletos que de outs hasta ser cambiado. Otra vez en deuda, y ya no es por el receptor ni por un inicio tardío del cotejo como afirmó luego del Opening Day respecto a su enfrentamiento con los Medias Rojas de Boston.