Kiké Hernández fue el Jugador Mas Valioso no oficial de la Serie Divisional donde los Medias Rojas vencieron 3-1 a los Rays de Tampa Bay. Se robó el show con una actuación. Sin embargo, todo lo logrado pareciera poco con lo hecho en el partido #1 de la Serie de Campeonato contra los Astros.
Por una noche, Kike Hernández fue la mejor presentación de Barry Bonds o de Lebron James en las finales del 2017 y 2018, en ambas fue el mejor jugador de la serie pero su equipo fue superado por el rival.
Kike logro su 2do partido de 4 hits en esta postemporada, incluyo un par de jonrones y terminó a un triple del ciclo.
Con Boston detrás y Sale contra las cuerdas en la segunda entrada, Hernández vino al rescate robando a Michael Brantley con una atrapada brillante en el jardín central poco profundo. El esfuerzo de lo más destacado dejó varadas las bases llenas para Houston mientras mantenía el déficit en 1-0.
– 3er juego de playoffs en su carrera con 10 bases en total (mayor cantidad de todos los tiempos)
– Primer bateador inicial con 2 HR y 4 hits en un juego de playoffs
– 4to jugador en tener múltiples juegos con 4+ hits en una sola postemporada.
La carrera de Hernández como gigante de la postemporada está alcanzando niveles históricos. Con un doble también en el cuarto, sus 13 hits en sus últimos cuatro juegos son la mayor cantidad en un lapso de cuatro juegos para cualquier jugador en la historia de la postemporada de la MLB.
En resumen, Hernández jugó uno de los mejores juegos de postemporada en la historia de los Medias Rojas el viernes por la noche. Jugó un juego para todas las edades, incluso si no envejece bien. Solo John Valentin en 1999 y Todd Walker en el 2003 tuvieron partidos de 4 hits incluyendo 2 HR en la historia de postemporada. Ninguno de ellos salvaron múltiples carreras con su defensa. Si, Kike Hernández es probablemente el mejor partido de playoff en la historia de Boston. (Disculpas al Big Papi y sus históricos batazos de postemporada, batazos históricos pero no mejores juegos que los de Kike).