Bien dice un dicho que el líder no nace, sino que se hace, y tal parece que es así. Al menos eso es la conclusión que se puede obtener al ver el caso de Julio Rodríguez, jugador de los Marineros de Seattle que está disfrutando de su primera temporada en las Grandes Ligas y que a pesar de eso, ya muestra una madurez impropia para su corta edad.

Con unos muy tiernos 21 años el oriundo de Loma de Cabrera ha probado no solo ser un fastuoso jugador al poner números exorbitantes que a todas luces le bastarán para ganar el premio a Novato del Año de la Liga Americana, sino también un increíble motivador de sus compañeros y alguien acostumbrado a llevar la batuta dentro del clubhouse.

Esto quedó en evidencia el día de ayer cuando tras ganar el último juego de la campaña ante los Tigres de Detroit en condición de locales por pizarra de 5×4, los Marineros enviaron un mensaje a su afición a través del chico quisqueyano.

Sin miedo y con temple

Ante un T-Mobile Park repleto y enardecido debido a la clasificación a los playoffs de lo Mariners luego de 21 años de sequía, el jardinero central tomó la palabra para hacer llegar un muy bonito pero a la vez contundente discurso a todos los fanáticos.

J-Rod abrió dándole las gracias a todos por haberlos apoyado durante toda la fase regular. Asimismo, les hizo saber que eran los mejores seguidores de todo el mundo por estar en las buenas y en las malas. No obstante, lo más relevante de su intervención llegaría después:

“Vamos a tenerlos a todos ustedes en nuestros corazones, y vamos a dar lo mejor de nosotros por esta ciudad y por cada uno de ustedes”.

Con una frase corta e igualmente impactante, Rodríguez  se robó el corazón de un público que ya de por sí le manifiesta su amor cada vez que salta al terreno.

Estadísticas increíbles

Tan solo ayer, último día de la campaña, Julio aprovechó para agregar el jonrón 28 a su cuenta personal. También bateó para .284 de promedio, con 25 dobletes, 75 carreras impulsadas y 84 anotadas. Además, robó 25 bases, apuntándose un interesante 20-20 (20 cuadrangulares y 20 almohadillas estafadas) en su zafra de debut.