José Altuve tiene como uno de sus más preciados recuerdos la Serie Mundial de la MLB que conquistó con la franela de los Houston Astros en 2017. En aquella ocasión, el venezolano y su equipo se impusieron 4-3 a Los Ángeles Dodgers. Una afronta que en dicha ciudad aún no perdonan.
Una de las tradiciones en los deportes norteamericanos es la de regalar momentos de fama y gloria, efímera, a los aficionados que asisten a los estadios a presenciar los partidos.
En la previa del juego entre Astros de Houston y los Yankees de Nueva York, Altuve se refirió a la situación que vive en cada visita al estadio de los Bombarderos. “Solo me enfoco en jugar el partido, hago todo lo posible por mantener todo al márgen. Solo poner mi foco en el juego. Debo estar listo para ayudar a mi equipo”, explicó el camarero de los siderales.
También ofreció su punto de vista sobre la pasión con la que viven los fanáticos del equipo del Bronx. “Obviamente, los fanáticos de los Yankees son realmente fanáticos. Y se meten mucho en el juego. Ellos, ya sabes, realmente aman el juego. ¿Cómo puedo decirlo? Les encanta el juego”, recalcó. También aseguró que harán todo lo posible por acabar la serie en este juego.
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El famoso caso del robo de señas y trampa de los Astros de Houston es algo que ha estado persiguiendo durante los últimos años a José Altuve, situación por la que no es el deportista más querido. La ciudad de Los Ángeles le ha mostrado su desencanto al venezolano y no solo en los estadios de la MLB, ahora también en el hockey de la NHL.
El equipo Los Ángeles Kings de la NHL hizo una dinámica de parecidos entre peloteros y fans en la pantalla gigante de su estadio y decidieron incluir a “AstroBoy” con una broma de muy mal gusto, donde se burlan de él.
En la dinámica salieron peloteros como Tony Gonsolin y Max Muncy, quienes fueron comparados con aficionados. Al momento de Altuve, fue comparado con un bote de basura, haciendo alusión a aquel sistema ilegal usado por los Astros para robar señas
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