Es hora de que Gallo pierda su puesto de titular. Mejor aún, que sea designado para asignación, cambiado por cualquier cosa, o simplemente liberarlo y se le pague su dinero.

Ya son recurrentes los juegos del jardinero que resultan en cero contribuciones.

Al parecer es una gerencia a la que le cuesta admitir sus errores. Clint Frazier, Gary Sánchez… Varios experimentos se pueden citar en dónde a los del Bronx les ha costado soltar.

Gallo no ha funcionado y no quedan esperanzas de que mejore, no funcionará. Se llegó al punto en el que no importa que los Yankees renunciaran a cuatro buenos prospectos para obtener a Gallo el verano pasado de los Rangers de Texas. Es hora ya de reconocer este movimiento como un mal intercambio y seguir adelante. No hay mejor momento que ahora cuando el club está 56-20.

Las excusas que los Yankees siguen dando para justificar a Gallo se han vuelto risibles. Aaron Boone no puede criticar a Gallo públicamente, el gerente general Brian Cashman no lo toleraría, por lo que escuchamos sobre de lo duro golpea las pelotas (de foul) o los profundos elevados, adjunto con los ‘cuchumil’ ponches.

Se nos hace la historia de o duro que Gallo siempre está trabajando, creando algo de tracción y que está cerca de calentarse.

Gallo en el plato por lo general ha causado cualquier cosa menos que bombas para correr alrededor del diamante, el tipo de explosión ha generado es el desastre del disgusto por la pobre producción. A menudo el sonido que acompañan sus turnos provienen de los fuertes abucheos que recibe al fallar sus swings. Casi no suenan los contactos de la pelota con el madero en casi ninguno de sus turnos.

Vayamos al grano, los hechos:

Gallo ahora está sin hits en sus últimos 24 turnos al bate con 13 ponches. Está bateando .167 con nueve jonrones, 18 carreras impulsadas, 84 ponches en 186 turnos al bate más 28 bases por bolas en 62 juegos.

A pesar del pobre rendimiento de Gallo el año pasado, ha sido peor esta temporada logrando los mínimos de su carrera (desde su primera temporada completa) en promedio, tasa de jonrones (4.2%), tasa de boletos (13.1%), OPS (.609) y promedio en base (.276). Su tasa de ponches de 39.3 es la más alta de su carrera.

Este año, Gallo ni siquiera está tomando boletos, por lo que todo lo que ha hecho ofensivamente es un promedio de 0.75 jonrones y 1.5 carreras impulsadas por semana. ¡Por semana! ¡Qué terrible es eso! Eso es lo que obtienen los Yankees por $10.275 millones.

En 120 juegos para los Yankees desde el 30 de julio pasado, es un bateador de .163 con 22 jonrones, 40 carreras impulsadas, 172 ponches y 65 bases por bolas. Su primera serie después de cambiar de equipo fue un anticipo de lo que Gallo ha sido para los Yankees: se fue de 12-1 sin carreras impulsadas, dos bases por bolas y cinco ponches en una barrida de tres juegos como visitante sobre los Marlins de Miami. En ese entonces, tal como ahora, los Yankees ganaron a pesar de Gallo.

Gallo ya sido sentado con más frecuencia con 3 banquillos en los últimos 7 partidos de los Yankees.

Boone ha explicado de  Gallo su parecer:

“Creo que las bases por bolas bajaron, probablemente perdió algunas cuentas de 3-2 en las que siento que todavía tiene muchos de esos turnos al bate en los que está profundizando en la cuenta, llegando a 3-2 y luego en lugar de una base por bolas. es un out más a menudo. Siento que los equipos realmente le han lanzado duro, han atacado algunas áreas donde pueden tener éxito”.

Excusas insulsas. ¿A quién no se le lanza duro hoy día? Los buenos bateadores se ajustan.

Boone prosiguió con su discurso sinsentido:

Está trabajando arduamente para tapar esos agujeros y solo esperamos que algunos pequeños aciertos conduzcan a lo que sabemos, que es un jugador muy talentoso que ha tenido éxito y tuvo éxito en el Juego de Estrellas en esta liga. Debe tratarse de un pequeño bache que puede superar y hacer clic y comenzar a generar un poco de impulso. Y vamos a seguir tratando de apoyarlo a través de esto”.

¿Por qué no hacer algo más drástico?Seguir con Gallo no tiene sentido.

La noche siguiente Gallo se fue 3-0. Justo después de que se fue de 4-0 con un ponche en la victoria inaugural luego de que Boone diera las declaraciones citamos anteriormente, en una serie de tres partidos de los Yanks contra Oakland que culmina hoy sin Gallo está vez en la alineación. Por suerte.

De hecho Boone, había defendido a Gallo tras el primer partido de la serie contra los Atléticos:

Perdió el jonrón en la línea. Sentí que consiguió algunos buenos swings. Sé que está tratando de acortar para manejar cómo intentan atacarlo. El otro día falló por poco un jonrón de tres carreras con la pelota que pegó en el aire a una milla de la cerca. Simplemente no está obteniendo los resultados en este momento”.

¿No obtienes resultados? Es un problema que se puede solucionar.  Sentar a Gallo y jugar al utility Marwin González.

Después de un comienzo lento, González está bateando .264 en 42 juegos con tres jonrones, todos los cuadrangulares durante en una racha de ocho juegos desde el 19 de junio en los que está bateando .391. González se unió a los Yankees esta primavera luego de dos temporadas realmente malas. Pero tuvo algunos años importantes con Houston, por lo que es capaz de sumar.

¿Alguien puede argumentar que los Yankees no estarían mejor con González en lugar de Gallo?

Incluso, podría decirse que Miguel Andújar se está desperdiciando en Triple-A con un promedio de .306 y siete jonrones en 42 juegos para Scranton después de principios de esta temporada. No es que resultara muy productivo con anterioridad. Pero es difícil imaginar peores resultados que los de Gallo.

Los Yankees no ganaron en octubre de los últimos años cuando tenían a Gary Sánchez y Clint Frazier.

Gallo es hoy día un Clint Fraizer o Gary Sánchez de ese entonces. Conectó una tonelada de jonrones cuando jugaba para Texas pero bateando por debajo de .200. Aparte de su juego defensivo, todo en su juego ha retrocedido desde que se convirtió en Yankee.

Es hora de probar algo más.