El primero de la serie entre los Yankees de Nueva York y los Guardianes de Cleveland ha dejado mucha, pero mucha, impaciencia de lo que podría o no suceder en esa llave.

Harrison Bader que apenas jugó 14 encuentros en la ronda regular con los neoyorquinos liquidó su primer estacazo de vuelta completa en este playofff y el también primero con los Yankees de Nueva de York.

Bader castigó al pitcher de los Guardianes Craigg Quantrill que le dio un fuerte golpe a los lados de la cerca del jardín izquierdo.

Según las Grandes Ligas de Béisbol, y sus proyecciones el garrotazo que mandó el jugador de los Yankees de Nueva York viajó a una distancia de 406 pies. Pese a que la cerca del Yankee Stadium son una de las más cortas de todo el circuito, la pelota se habría ido en cualquier estadio de las Grandes Ligas de Béisbol.

Desde la temporada de 2019 Bader había tenido experiencia en juegos de postemporada. Sin embargo, nunca había tenido la oportunidad de soltar un tetrabatazo en 10 encuentros disputados.

Con los Cardenales de San Luis, club con el que jugó en estas instancias dejó un promedio de apenas .136 con un trío de empujes en 22 turnos al bate.