Los Padres de San Diego y Manny Machado enfrentan una serie de tres enfrentamientos durante el fin de semana en un estadio donde no son muy queridos: el Dodger Stadium.

El dominicano es uno de los jugadores más odiados por la fanaticada de los Dodgers de Los Angeles y no se ha espacado de los abucheos en el escenarios de California.

En medio de los pitos y los silbidos que recibió el jugador en cada turno al bate, el antesalista tomó revancha y silenció a todos los presentes con su cuadrangular 26 de la temporada.

Machado descifró los envíos del mexicano Julio Urías y la mandó a volar entre el center y right field para colocar la primera rayita de los Padres, en la parte alta de sexta entrada.

El tablazo del criollo salió a una velocidad del bate de 106.4 millas por hora y recorrió una trayectoria de 416 pies de distancia.

A psar del bambinazo de su estrella, la escuadra de San Diego vivió un encuentro para el olvido cayendo derrotados por paliza de 12-1, en el segundo duelo de la serie en el Dodger Stadium.

El Ministro” es sido uno de los bateadores que más daño le ha hecho a la novena de Los Angeles, ya que en el primer desafío también destronó enorme jonrón para guiar el triunfo de su equipo.

El quisqueyano se la ha visto clarita al pitcheo de los Dodgers con par de vuelacerca en dos partidos y muestra un astronómico average de .448 en sus últimas siete juegos.

Machado ha disparado cuatro jonrones, 12 carreras remolcadas, siete anotadas, 13 indiscutibles y un porcentaje de embasado (OBP) de .467 en 29 apariciones en el plato.

Entre los candidatos al MVP

El dominicano colecciona números para ser seleccionado entre los favoritos al Jugador Más Valioso en la Liga Nacional con promedio al bate de .306, 26 cañonazos, 88 rayitas impulsadas, 85 anotaciones, 145 imparables, 34 dobles, OBP de .374, OPS de .920 y siete bases robadas en la vigente campaña.

A pesar de tener perdido el banderín en la División Oeste, los dirigidos por Bob Melvin son dueños del segundo comodín en el viejo circuito con miras a la clasificación a la postemporada.