Arístides Aquino es uno de los peloteros que más ha tenido que batallar en los últimos tiempos para sostenerse en las Grandes Ligas, eso seguro. Después de tener un 2019 sumamente prometedor, su nivel declinó hasta niveles verdaderamente preocupantes, por lo que varias veces se ha elucubrado que podría ser bajado a Triple A o cambiado a otro equipo.

No obstante ahí sigue, dando batalla con los Rojos de Cincinnati, conjunto con el cual actualmente está viviendo su quinta temporada como ligamayorista y al que a pesar de no haber podido ayudar demasiado en lo que va de año ayer le regaló par de bambinazos.

Con una línea ofensiva de .122/.157/.327, el oriundo de Santo Domingo está dando de nuevo muestras de un rendimiento flojo en lo que va de campaña en este 2022, pero en el día de ayer fueron muy distintas las cosas para él.

Dos tremendos jonrones

Aunque en el día de ayer los Reds cayeron por pizarra de 7×4 frente a los Cachorros de Chicago, fue una jornada bastante productiva para el hombre de 28 años de edad al que apodan PJ. Logró hilvanar 2 cuadrangulares, yéndose gracias a ello de 4-2 con 3 carreras impulsadas y 2 anotadas.

El primero de los estacazos de vuelta completa llegó en la baja del sexto episodio, cuando Arístides Aquino desapareció la bola con su compañero Joey Votto a bordo.

Más tarde, en el octavo capítulo, se encargó de despachar con las bases vacías otro vuelacercas. Esta vez la bola abandonó el parque por el jardín central recorriendo una distancia de 439 pies, lo que estableció un récord como el batazo más largo dentro de la franquicia en este 2022.

Podría enracharse

En los últimos 2 cotejos luego de su regreso al Big Show tras más de un mes en las menores, Aquino ha ligado de 8-4, con doblete y 2 jonrones. También cuenta con 5 rayitas empujadas y 2 anotaciones. ¿Estaremos ante un resurgir ofensivo?