Sólo bastó un parpadeo de Zack Wheeler (0-1) para que el sueño de irse a casa con la serie 2-0 se esfumara. En el sexto inning, con dos outs en la pizarra, le pegó la pelota a Ronald Acuña y por allí se colaron los Bravos de Atlanta para blanquear 3-0 a los Filis de Filadelfia y nivelar 1-1 la Serie de División de la Liga Nacional.
Durante 2 horas y 48 minutos, un total de 42 mil 735 personas se dieron un banquete de buena pelota. Valió la pena haber esperado 2 horas y 55 minutos por culpa de la lluvia. ¡Valió la pena, seguro!
Las carreras no se podujeron con jonrones sino con sencillos. Atlanta sabía que en esta ocasión necesitaba poca carreras para ganar. Su abridor Kyle Wright (1-0) estaba en la lomita y retiro a 12 de los primeros 14 que enfrentó. Además, estaban con el bullpen preparado y esta es una de las principales armas de la tropa que dirige Brian Snitker.
“Creo que durante toda la temporada ganamos sólo 12 o 13 partidos sin sacar la pelota”, contó el mánager. “Pero es que los muchachos hoy tuvieron muy buenos turnos al bate”.
Y ni hablar de la defensiva. Swanson hizo una jugada de película en las postrimerías de juego, que sirivió para cimentar la victoria y mantener el ánimo del equipo arriba.
“Creo que la defensa es mi gran aliada”, dijo el serpentinero ganador en la rueda de prensa después del partido. “Creo que esto también nos ayudó mucho a ganar, porque lanzó el sínker, que produce muchos rollings, y eso nos ayuda mucho”.
“Necesitábamos esta victoria”, declaró el timonel ganador. “Fue realmente impotante para nosotros haber regresado de esa manera. Y Wright estuvo genial”.
Wheeler, por su parte, andaba aún más afinado. Llegó a retirar a los primeros nueve bateadores que enfrentó y fue Acuña, precisamente en el cuarto inning, quien le rompió la perfección con un sencillo. Pero eso no fue mayor daño. El luego sacó a los tres siguiente de manera consecutiva.
Siguió el dominio del serpentinero rojo hasta que le arrimó tanto una pelota a Acuña que se la pegó en el codo derecho. Durante cuatro minutos el venezolano se retorció del dolor y recibió ayuda del tráiner del equipo.
Caras de preocupación en los fanáticos que se apostaron elas tribunas del Truist Park de Atlanta. Muchos pensaron que la lesión sacaría del juego al varguense, pero no fue así. Más buen sacó de concentración de Wheeler, quien luego de eso le dio boleto a Swanson. Matt Olson aprovechó una pelota que venía por la zona para hacer swing.
La rolata salió atravesada por la inicial, con algo de fuerza, Rhys Hoskin no pudo dominarla y la bola se fue rauda y veloz hasta el jardín derecho. La velocidad de Acuña fue mucho más y fue allí cuando se encendió la pizarra.
Lo demás es historia. Con doas outs, Wheeler no pudo con Austin Riley, quien con un machucón por la zona del pitcher impulsaba a Swanson desde la tercera base. Olson se metía hasta la segunda. Vino el rolling por el Travis D’Arnaud que selló la racimo de tres carreras.
De allí en adelante el relevo de Atlanta se encargó de todo y Kenley Jansen cerró la puerta en el 9° inning para adjudicarse el primer salvado de esta postemporada.
Este jueves hay descanso y el viernes se van las cosas a Filadelfia. Allí se podrá definir todo. En esta series de formato 2-2-1 en 39 nueve ocasiones los equipos han dividido en los dos primeros juegos, pero el que gana el tercer y cuarto ha pasado en 26 ocasiones (67 %) a la Serie de Campeonato.
Así de decisiva será la parada en la casa de los Filis.
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